Se trata de Juan Carlos M. T., de unos 45 años. Había ejercido en la capital cacereña en la parroquia de San Pedro de Alcántara. Llevaba en el pueblo año y medio. Está pendiente de pasar a disposición judicial. El caso se encuentra bajo secreto de sumario
La Policía Nacional detuvo ayer al párroco de Arroyomolinos de Montánchez por presuntos abusos sexuales a menores cometidos en la capital cacereña. Se trata de Juan Carlos M. T., de unos 45 años, que llevaba año y medio ejerciendo en la parroquia de La Consolación de este municipio de la provincia. Según confirmaron ayer fuentes policiales el arresto se produce después de una larga investigación. El sacerdote se encuentra detenido en la comisaría provincial, a la espera de que pase a disposición judicial, que decidirá su puesta en libertad o su ingreso en prisión. El caso se encuentra bajo secreto de sumario.
Agentes de la Policía Nacional se presentaron ayer a primera hora de la mañana en Arroyomolinos. Según cuentan testigos primero se dirigieron al banco para analizar las cuentas que el párroco tenía a su nombre. Después se dirigieron hasta la casa parroquial, donde reside el cura durante pequeños periodos de tiempo (ahora llevaba allí unos veinte días). Llamaron a la puerta pero el sacerdote, que se encontraba dentro, no les abrió. La policía necesitó la ayuda de un matrimonio de la localidad para poder acceder al domicilio (la pareja tiene llaves de la casa) y proceder así a la detención de Juan Carlos M. T.
ALARMA EN EL PUEBLO
La noticia ha pillado por sorpresa a todos los vecinos de Arroyomolinos. Nadie se explica lo sucedido. El párroco había conectado a la perfección con los habitantes y había conseguido que tanto mayores como jóvenes se implicaran en las actividades de la iglesia. «Nunca hemos tenido ningún problema con él, al contrario. Es un cura joven y con mucha participación en el pueblo», decían ayer los vecinos. Las personas mayores asiduas a la iglesia se encuentran alarmadas por las noticias que se escuchan. Ayer la policía no quiso darles más datos sobre lo ocurrido.
La policía registró la vivienda parroquial de Arroyomolinos y acto seguido su domicilio de la capital cacereña, donde vive de manera habitual. Registraron ordenadores y demás enseres del párroco. Los presuntos hechos de pederastia por los que se le acusa fueron cometidos, según ha podido saber este diario, en la capital cacereña. Y es que, antes de que fuera destinado a la parroquia de Arroyomolinos, Juan Carlos M. T. había ejercido de párroco en Cáceres, en la residencia geriátrica Ciudad Jardín y como vicario de la parroquia de San Pedro de Alcántara.
Este es el segundo caso de presuntos abusos sexuales cometidos por curas en la región el último año. En julio del año pasado el juzgado de Don Benito decretó el ingreso en prisión preventiva del cura de Mengabril (Badajoz), acusado también de abusar sexualmente de un niño de nacionalidad rumana. El caso aún no ha sido juzgado.
El Obispado aparta al cura de Arroyomolinos tras su detención por la Policía
El párroco de Arroyomolinos de Montánchez (Cáceres), detenido por supuestos abusos a menores, ha sido apartado del ejercicio de su ministerio hasta la conclusión del proceso judicial, según ha decidido el Obispado de Coria-Cáceres.
Pese a que el acusado goza de la presunción de inocencia, el Obispado ha tomado esta determinación «pensando en el bien del Pueblo de Dios», «por la resonancia social que el hecho ya está teniendo» y «para salvaguardar todos los derechos», según ha informado en un comunicado a tenor de la noticia adelantada hoy por EL PERIÓDICO EXTREMADURA.
Por ello, ha procedido a limitar de forma cautelar el ejercicio de su ministerio, apartándole del mismo hasta la conclusión del proceso judicial.
Asimismo, el Obispado de Coria-Cáceres señala que aunque desconoce los motivos por los que es acusado, expresa su «profunda consternación» porque un sacerdote haya podido cometer algún delito, «sea del carácter que sea», cuando se espera de él «una conducta ejemplar conforme al Evangelio que predica».
Ofrece su «completa disposición» a colaborar con la justicia en lo que sea necesario «y en las formas que esta estime oportunas».
Afirma que la parroquia de Arroyomolinos seguirá siendo atendida provisionalmente por el Vicario de Pastoral y, en breve, se nombrará un sacerdote que desempeñará el cargo de administrador parroquial.
Fuentes de la Policía Nacional confirmaro a EL PERIÓDICO EXTREMADURA la detención en el día de ayer del sacerdote -que se encuentra en las dependencias de la comisaría de Cáceres- por un delito de abusos sexuales a menores.
Este es el segundo comunicado que la diócesis emite en menos de 24 horas. El primero, aunque colgado en torno a las 20.30 horas en la página web del obispado, fue remitido a este diario a medianoche. En él se decía textualmente esto:»En la tarde del viernes 8 de abril de 2016, el Secretario-Canciller del Obispado de Coria-Cáceres, ha recibido notificación de la policía de la detención de un sacerdote de la diócesis, párroco de Arroyomolinos. Ante esta información manifestamos: 1º. Las instrucciones están bajo secreto de sumario, por lo que no hemos recibido notificación de las acusaciones que pesan sobre él. 2º Debido a esto, llamamos a la prudencia sobre las ideas y rumores que pueden circular acerca de las causas de su detención. 3º El Obispado está completamente dispuesto a colaborar con la justicia en este asunto y en cuanto tengamos más información relativa al caso la comunicaremos de forma oficial».
La noticia ha causado una profunda conmoción, especialmente en Arroyomolinos y Cáceres, donde el sacerdote era muy conocio. Medios de comunicación nacionales como El Diario de Navarra se hacen eco hoy de la noticia citando como fuente a EL PERIÓDICO EXTREMADURA.