Los legisladores del Congreso de Filipinas aprobaron una ley de reconocimiento del día 08 de septiembre como festivo nacional en conmemoración de la Natividad de la Santísima Virgen María. La norma, de recibir la aprobación final por parte del Presidente del país, Rodrigo Duterte, creará el segundo festivo de la nación motivado por una solemnidad mariana.
El congresista Rodolfo Farinas fue el autor del proyecto de ley, argumentado como una forma de facilitar que los habitantes católicos “veneren y celebren su devoción a la Santísima Virgen María”. Este razonamiento hizo eco en un país con más de 76 millones de católicos que representan un 88% de la población. Los fieles locales se distinguen por un marcado fervor mariano expresado en multitudinarias manifestaciones de fe en honor de numerosas advocaciones veneradas a los largo de toda la nación.
Mons. Ruperto Santos, Obispo de Balanga, celebró la iniciativa de los legisladores, quienes “hicieron en todo su derecho lo que los Filipinos más apreciamos en nuestros corazones. El Senado manifestó públicamente que nuestro país es mariano”, indicó el prelado, según reportó UCANews. El Obispo calificó el hecho como “muy inspirador y una buena noticia interesante”.
La aprobación de la festividad civil, sumado al reconocimiento similar de la fiesta de la Inmaculada Concepción en 2017, contrasta con el ambiente de fuertes tensiones entre el gobierno del país y los Obispos. Los prelados han denunciado el aumento de ejecuciones extrajudiciales en medio del combate al tráfico de drogas, mientras el Presidente de la nación ha proferido graves insultos en contra de los Obispos, llegando incluso a blasfemar en declaraciones públicas que han merecido el rechazo de la Iglesia.