Alfredo Dagnino, presidente de la Fundación CEU, anunció que sus colegios se retiran de la FERE, confesional y mayoritaria en el sector, para integrarse, todos, en la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), minoritaria y teóricamente aconfesional. Razones: la actitud resignada de la FERE ante la nueva asignatura, que sus centros impartirán después de haber consentido el Gobierno socialista que cada colegio la adapte a su ideario católico. Dagnino, líder además de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP), manifestó que sus organizaciones mantendrán la objeción de conciencia y "la tensión" contra la asignatura en una "batalla" que pasa también por los recursos judiciales.
Sólo un colegio
Según Dagnino, la bandera de la libertad de enseñanza les separa de otras organizaciones con "posiciones" menos combativas. "A mí me producen dolor estas actitudes porque FERE es una institución de Iglesia y forma parte de mi Iglesia. Nos hemos sentido poco apoyados por FERE. No estoy dispuesto a alimentar fricciones y enfrentamientos, pero tenemos que tener claro dónde estamos. Dicen que la Iglesia está dividida, pero la Conferencia Episcopal ha emitido dos notas al respecto que dicen claramente que la asignatura es inaceptable, en la forma y en el fondo, y que persigue una pretensión ilegítima, que es imponer a todos la moral de unos pocos", dijo el presidente de la Fundación CEU en conferencia de prensa. Pese a todo, reconoció que sólo uno de los seis centros escolares de su fundación -el colegio Jesús María, de Alicante- pertenecía a la FERE.
Ante este anuncio público de la Fundación San Pablo-CEU, la FERE-CECA emitió un comunicado lamentando "profundamente" el intento de ruptura de la unidad de la escuela católica. Añade: "No podemos olvidar que estamos hablando de un solo centro, lo que deja sin incidencia numérica la noticia emitida por San Pablo y CECE, y pone de manifiesto lo desproporcionado de la misma. Convocar una rueda de prensa para contar que un centro pasa de una institución a otra es distraer a la sociedad de lo que importa y de lo que debería preocuparnos, cuestiones como la calidad del sistema educativo, el fracaso escolar, la integración y, en nuestro caso, además, la transmisión de los valores del Evangelio, que es lo que nos da sentido como escuela católica".
Lo que más ha decepcionado a la federación de religiosos de la enseñanza es la "escenificación de ruptura" realizada por la Fundación San Pablo-CEU, porque "afecta negativamente a la unidad de la escuela católica" y porque trata de "desprestigiar" a la FERE-CECA, "una institución canónica", dice el texto del comunicado, "que puede garantizar su carácter de escuela católica frente a una patronal aconfesional que acoge la titularidad de cualquier centro, según las declaraciones de la propia CECE".
"El motivo que aduce el CEU para que su colegio abandone FERE-CECA parece más bien una disculpa. FERE-CECA siempre se ha mostrado contrario a la asignatura de Educación para la Ciudadanía y lo único que ha hecho es aplicar la legalidad y garantizar a las familias que han elegido sus centros que en éstos nunca se impartirá un contenido contrario a la confesión católica", concluye el comunicado de FERE.
