Responsables de la Iglesia Católica, la comunidad musulmana y la judía han defendido este miércoles la clase de Religión en los colegios españoles, frente a la propuesta del PSOE de sacar la asignatura de las aulas, porque consideran que esta materia es una escuela de «valores».
«No es idóneo (eliminar la Religión del currículo) porque puede ayudar a fomentar los valores que todos anhelamos», ha indicado el responsable de la Comunidad Islámica de España (CIE) y presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE), Riay Tatary, durante una comparecencia antes de intervenir en una mesa redonda organizada por la Conferencia Episcopal Española con motivo de los 50 años de la promulgación de la declaración Nostra aetate del Concilio Vaticano II.
Además, ha apuntado que le «extraña» mucho que esta propuesta venga del PSOE teniendo en cuenta que los musulmanes firmaron sus acuerdos con el Estado y los desarrollaron en materia educativa estando los socialistas en el Gobierno. Por ello, ha anunciado que durante los próximos días se reunirá con algunos cargos del partido para debatir sobre este tema.
En esta línea, el presidente de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), Isaac Querub, ha asegurado que no van a apoyar nunca «ninguna iniciativa que vaya ni contra la Religión católica ni contra ninguna religión». «Nosotros somos partidarios de la enseñanzas de los valores contenidos dentro del judaísmo, del cristianismo y del islam», ha matizado.
Querub se ha mostrado partidario de un Estado aconfesional pero ha precisado que si se imparte Religión en los colegios, tanto católicos como musulmanes y judíos deben tener la opción de enseñar esta asignatura. Asimismo, ha pedido que se respete a los judíos y no se les obligue a examinarse en sábado o en Yom Kipur. También ha pedido que el derecho a la asistencia religiosa en los hospitales, cuarteles y cárceles se aplique de forma «práctica, fácil y normal».
Por su parte, el arzobispo de Granada y presidente de la Comisión Episcopal de Relaciones Interconfesionales, monseñor Javier Martínez Fernández, considera que la educación puede ayudar «sin duda» a fomentar el diálogo interreligioso en la sociedad española pero ha precisado que esto no servirá de mucho si no se produce «un cambio en los corazones».
«Lo más importante es que las personas podamos mirar al otro con afecto. La diferencia es una ocasión de crecer unos al lado de otros», ha añadido, al tiempo que ha rechazado esa «antropología que ha dominado mucho en el mundo contemporáneo de negar o aniquilar al otro para afirmarse a uno mismo». En su lugar, ha apostado por una antropología en la que el hombre «se afirma a sí mismo afirmando al otro».
Los representantes de las tres religiones han mostrado su alegría por la conmemoración del 50 aniversario de la Nostra aetate, que se firmó en Roma el 28 de octubre de 1965 y con la que comenzó una nueva etapa de diálogo oficial por parte de la Iglesia Católica con las religiones no cristianas.
MUCHO POR HACER
«Estamos de enhorabuena, la declaración Nostra Aetate supuso un cambio radical en el enfoque de las relaciones entre católicos y judíos. Hasta entonces, el pueblo judío era considerado un pueblo deicida, de pérfidos y a partir de esta declaración se estableció un diálogo fructífero», ha afirmado el presidente de la Federación de Comunidades Judías de España.
En cualquier caso, Querub ha subrayado que el diálogo judeocristiano en España está «en sus albores» y que aún queda «mucho por hacer», más aún en un clima internacional en el que «católicos y judíos son perseguidos y asesinados por el mero hecho de serlo». Por ello, ha invitado a defender juntos los valores de la civilización judeocristiana y a «no callarse cuando gente fanática les mata».
Concretamente, sobre España, ha expresado el deseo de que la Iglesia católica haga «un esfuerzo por profundizar en el diálogo» pues, a su juicio, «los vientos de Roma no han soplado tanto como en otros países de la órbita occidental». «Como en España no se ha vivido la Shoa, muchas veces, la Iglesia católica no ha hecho el mismo esfuerzo que en países como Alemania, Francia, Italia o EEUU y se ha hecho poco por ayudar al centro de estudios judeocristianos en España y en la educación de los jóvenes en la enseñanza del aprecio mutuo», ha aseverado.
AYUDA A LOS REFUGIADOS
Por otro lado, el responsable de la CIE, Riay Tatary, ha explicado que la declaración Nostra aetate abrió el camino a unas relaciones «muy fluidas» entre católicos y musulmanes, tendiendo «puentes de trabajo común y de solidaridad». «Estamos compartiendo el país, estamos construyendo España juntos», ha remarcado.
Precisamente, ha recordado que este martes se reunió con el cardenal arzobispo de Valencia, el cardenal Cañizares, y crearon una comisión para atender a los refugiados, y ha asegurado que «por supuesto» van a intentar que esta colaboración se extienda con la Conferencia Episcopal Española para coordinar su ayuda a los refugiados a nivel nacional. También ha contado que le propuso a Cañizares hacer una oración por la paz todos unidos.
En cuanto a la normalización de la presencia musulmana en la sociedad española, Tatary ha indicado que un momento se pudo temer un contagio de la islamofobia presente en otros países pero ha indicado que «la población española ha demostrado mucha madurez».
«El 11 de marzo de 2004 cuando pasó lo que pasó, nunca hemos tenido ni siquiera una pintada. Nosotros dimos inmediatamente el mensaje que conocen. Ustedes saben que nuestros hijos salen del mismo portal y van al mismo colegio y vuelven a jugar juntos. Esta demostración que hemos dado tan sencilla ha calado mucho», ha explicado, al tiempo que ha agradecido los apoyos que recibieron del Gobierno y del Rey Juan Carlos I.