La plataforma HazteOir.org, que encuadra esta futurible formación en el «centro-derecha», asegura que el PP debería dejar de actuar como «correa de transmisión de la izquierda» para pasar a «defender valores como la vida o la familia»
Casi 10.000 personas han firmado en 72 horas una petición para que el expresidente del Gobierno y expresidente de honor del PP, José María Aznar, funde un nuevo partido que persiga «regenerar» el espacio de la derecha política, el «centro-derecha», según los cánones de los impulsores de esta iniciativa.
La plataforma HazteOir.org creó esta petición el martes, poco después de que se conociese la renuncia de Aznar como presidente de honor del partido, un cargo honorífico que había ostentado desde 2012.
En una nota de prensa difundida por esta plataforma, su presidente, Ignacio Arsuaga defiende que «la creación de una nueva formación política provocaría la redefinición ideológica del PP, que tendría que decidir si quiere defender valores como la vida, la familia y la libertad o quedarse en mera correa de transmisión de la izquierda”.
La petición, que en torno a las 15.00 horas de la tarde de este viernes contaba con 9.500 apoyos, incluye en su redactado algunas criticas al Ejecutivo y al PP de Rajoy. «¿Quieres que en el actual PP triunfe el liderazgo de Soraya Sáenz de Santamaría? Cuando lleguen las próximas elecciones, ¿querrás votar a una derecha progre, laicista y abortista, o prefieres la regeneración ideológica de la derecha española?».
En esta línea, el texto deja en el aire que los firmantes pretendan realmente apoyar con sus votos a Aznar en este futurible partido, pero insiste en que serviría para forzar al PP a corregir su rumbo.
«No le pedimos a Aznar que auspicie un nuevo partido porque pensemos que tengamos de votarle. Quizá le votemos, o tal vez no, dependerá de su oferta, de sus candidatos, etc. Pero si existiera un nuevo partido en el centro-derecha liderado (o apoyado) por una persona referente para muchos, podríamos olvidarnos de esa especie de condena que padecemos: la de votar tapándonos la nariz. Quizás porque el PP volvería a defender la vida, la familia o la libertad, para evitar perder votos a favor de ese nuevo partido… O quizás porque el nuevo partido nos convenza».