Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Santiago Gómez Sierra: Nos gustaría trasladarle a través de la presente nuestra más firme reprobación y oposición a su desafortunada hornilla en la Misa Pontifical de nuestra fiesta grande, la Romería del Rocío.
Al menos en aquella parte que dejó a un lado la doctrina evangélica para aventurarse en un terreno, el del discurso politico partidista, que, qué duda cabe que puede ser defendido a nivel personal pero que indudablemente quedó fuera de lugar en un acto religioso y sobre todo en representación de la Iglesia.
Mesa de Convergencia es un partido político independiente que cogobierna el Ayuntamiento de Almonte desde el 2019 con el PSOE, con firme convicción de izquierdas, por lo que puede imaginar nuestra sorpresa al escucharle hablar de temas tan delicados como el derecho a la vida, la familia o la educación desde su óptica personal y utilizados como pura y simple propaganda electoral que deja a una institución tan digna y elevada como la Iglesia seriamente marcada politicamente.
Permítanos recordarle que precisamente gracias a las políticas de esos partidos que, según sus palabras en la homilía, usted no defiende y hace un encendido llamamiento a su rechazo, uniones familiares del mismo sexo donde impera el amor, que es lo que debería preponderar en sus mensajes, gozan hoy en día de los mismos derechos que una familia formada entre un hombre y una mujer, pues se entiende con nítida claridad que la unión entre dos personas que se aman y quieren compartir sus vidas es lo verdadera y únicamente importante más allá de la fe que profesen.
Compartimos su visión con respecto al derecho a la vida humana, pero respetamos igualmente el derecho a la muerte digna, igual que respetamos la interrupción del embarazo si no es deseado por la gestarte, como así lo contempla taxativamente la ley vigente en nuestro país, el suyo y el nuestro y el de todos los españoles y españolas.
Estos temas darían para muchas horas de debate político, que estaríamos encantadísimos de celebrar con usted si así lo desea, pero, insistimos: no creemos que hacerlo en una homilia religiosa, donde deberían preponderar mensajes de paz, hermandad, amor y esperanza sea el escenario para ello.
Por todo lo expuesto, reiteramos nuestra más filme rechazo y oposición a su intervención política en nuestro pueblo, en un escenario exclusivamente religioso, y le emplazamos si lo desea a otro más proclive para discutir estos temas que tanto acaparan su atención en fechas tan señaladas para tantos y tantos miles, millones, de seguidores en todo el mundo de la Virgen del Rocío y su mundialmente famosa romería.
