Autoridades locales acusaron a los líderes de “engañar a nuevos miembros y desunir a la nación búlgara”. La libertad religiosa de los pastores fue violada con un “lenguaje peyorativo y hostil”, afirma el TEDH.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha dictado sentencia contra el gobierno de Bulgaria por violar el derecho a la libertad religiosa de los cristianos evangélicos del país. En 2008, el Ayuntamiento de Burgas (en el sudeste de Bulgaria) advirtió a todos los administradores escolares de la ciudad de que los evangélicos estaban “llevando a cabo una campaña masiva de agitación, engañando a nuevos miembros y desuniendo a la nación búlgara”.
También dijeron que asistir a servicios religiosos protestantes podía acarrear “aberraciones y trastornos mentales”, y pidieron a los alumnos que informaran de si habían conocido alguna vez a alguien de un grupo evangélico.
Los pastores Zhivko Tonchev y Radoslav Kiryakov interpusieron acciones judiciales contra la autoridad municipal y el Ministerio del Interior ante el Tribunal Administrativo, pero el caso fue desestimado y el gobierno nunca se retractó.
El siguiente paso que dieron, con el apoyo de la organización cristiana de derechos humanos ADF International, fue recurrir al Estrasburgo. El TEDH declaró que “las autoridades habían interferido de forma desproporcionada en el derecho a la libertad religiosa de los demandantes, sobrepasando su margen de apreciación”, con “un lenguaje peyorativo y hostil”.
Libertad religiosa
Tonchev declaró tras la sentencia que estaban “encantados de que el TEDH haya reconocido nuestro derecho fundamental a la libertad religiosa justo a tiempo para la Navidad”. “Los funcionarios del gobierno no tenían derecho a difamar nuestra fe cristiana, solo porque somos distintos de la práctica religiosa mayoritaria en Bulgaria”, añadía en relación a la Iglesia Ortodoxa.
“Como pastores dedicados a las enseñanzas de Jesucristo, nos alegramos de que se hayan reconocido nuestros derechos y los derechos de todos los creyentes”, añadía.
“Justicia para todas las personas creyentes en Bulgaria”
Robert Clarke, director de representación de ADF International y co-defensor en el caso, añade que “el derecho fundamental a la libertad religiosa pertenece a toda persona”. “El TEDH ha afirmado que el gobierno de Bulgaria se equivocó al atacar a esos cristianos con una campaña alarmista diseñada para suprimir la libertad de vivir sus creencias (…) Esto envía un mensaje claro de que los esfuerzos del gobierno por acabar con la libertad religiosa son inaceptables y fundamentalmente incompatibles con la democracia”, remarca.
El otro abogado, Viktor Kostov, ha subrayado que “con esta sentencia se ha hecho justicia a todas las personas creyentes de Bulgaria”, después de 14 años desde que las autoridades búlgaras “intentaron asustar a las familias para que no se acercaran a Jesucristo a través de estos ministerios, mediante una campaña de alarmismo dirigida a los niños”.