Comentarios del Observatorio
Observamos con sorpresa que el programa de actividades de la Escuela Naval incluye un «parón a las 20.00 de la tarde para la oración». Una programación oficial de una institución pública no debe contemplar actividades particulares como las religiosas, que son privadas de cada persona. Un régimen de internamiento militar puede contemplar tiempo libre para actividades particulares, pero de ninguna manera puede imponer que sea para realizar actividades religiosas. Es del todo inusual, violentando la laicidad institucional que debe prevalecer en todo organismo público, incluidos los militares.
Entrará este jueves 29 a las 7 de la tarde, posiblemente acompañada por su madre. El rey está en Barcelona.
La princesa Leonor pisará en calidad de alumna la Escuela Naval de Marín, en Pontevedra, por primera vez este jueves 29 de agosto, en torno a las 7 de la tarde. La heredera podría llegar en compañía de su madre, la reina Letizia, quien partirá a París este viernes para la inauguración de los Juegos Paralímpicos de París.
Lo que parece totalmente descartado es que acuda su padre, el rey, quien según la agenda de la Casa Real, a la misma hora en que ella ingresa estará en Barcelona presidiendo el estreno de la America´s Cup. La ministra de Defensa, Margarita Robles, sí ha estado visitando este miércoles 28 la Escuela, donde Leonor ingresa como guardamarina.
Robles ha señalado que la princesa «va a venir mañana como otra alumna más y se va a incorporar a tercero (curso) y en estos primeros meses va a estar aquí en la escuela, en igual régimen que sus compañeros y, por tanto, no hay ningún tipo de excepción, más que las que correspondan en su momento como consecuencia de que es la Princesa de Asturias».
Robles ha visitado el aula virtual, el planetario, las instalaciones deportivas, el comedor y el cuartel de los alumnos, así como el simulador de navegación (donde se ha mareado porque le han puesto mala mar), algunos de los espacios que la princesa Leonor conocerá de primera mano a partir de este 29 de agosto.
La escuela de Marín tiene previsto impartir docencia este año a 628 alumnos nacionales; 489 de los cuerpos específicos de la Armada, y 139 de los Cuerpos Comunes de la Defensa, además de a Reservistas Voluntarios de la Armada.
Asimismo, el establecimiento contará con la presencia de 23 alumnos internacionales de ocho países que cursarán un currículo completo o, al menos, un cuatrimestre.
Con todos ellos, compartirá instalaciones la princesa Leonor, quien en enero se embarcará en el buque Juan Sebastián Elcano para hacer una travesía a la manera tradicional durante cuatro meses, cuyo itinerario todavía no se conoce.
Leonor llegará a la Escuela vestida con el uniforme de la Armada de especial relevancia, modalidad B, esto es, todo blanco con chaqueta abotonada. Después de visitar el cuartel de alumnos, la princesa saldrá con el uniforme de trabajo modalidad C: camisa blanca de manga corta y pantalón largo blanco. En todo momento estará acompañada por el capitán de navío Pedro Cardona Suanzes, director de la Escuela Naval.
Leonor compartirá habitación con otras cuatro mujeres guardiamarina de tercer curso, una promoción que vive en un edificio en el que los dormitorios se comparten con menos personas y donde hay cuarto de baño en su interior. La rutina, eso sí, es la misma para todos: a las 06.45, la princesa se despertará con el toque de diana. Tendrá un tiempo para arreglar el cuarto -no vale que «la estiren», «es hacerla», (ha precisado Cardona Suanzes), asearse y desayunar en el comedor.
El director ha resumido la actividad de la Escuela de esta manera: «Desde que se levantan por la mañana hasta que se acuestan por la noche, siempre tienen una tarea que hacer. Entendemos que ellos tienen que alcanzar un nivel de exigencia, que es la excelencia. Por tanto, para ello necesitan que prácticamente todas las horas del día tengan una actividad».
A las 08.00, izado de bandera y a las 09.00 empieza la jornada con educación física y la instrucción. Leonor cursará materias de varios cursos elegidas cuidadosamente para ella en las que habrá asignaturas técnicas, científicas, militares y de otra índole.
La comida se servirá a las 14.00 de la tarde y durará hasta las 15.30. Las actividades se reanudan entonces, con un parón a las 20.00 de la tarde para la oración. A las 22.30 se decreta silencio, según las normas internas de la Escuela Naval de Marín.
La princesa y sus compañeros deberán seguir unas estrictas normas de vestimenta, que en su mayoría será de color blanco, azul y negro. La Escuela ha adoptado algunas medidas extraordinarias, ante la llegada de Leonor, como ampliar la plantilla de camareros en el comedor y vigilar el uso de los móviles para evitar la difusión de imágenes de la princesa y de la propia institución militar.
