La sustituta de Irene Montero ha dejado un buen sabor de boca tanto en la Iglesia como en los colectivos LGTBI pucelanos. Su visita al Papa en 2021 supuso para ella «un viaje en lo espiritual fabuloso».
Por desconocido, su nombre fue el que más sorpresa causó este lunes, al anunciarse por goteo el gabinete de ministros de Pedro Sánchez para esta legislatura. La elección de Ana Redondo García (Valladolid, 1966), además, fue la última en conocerse. La expectación por saber quién sucedería a Irene Montero, recuperada la cartera de Igualdad por el PSOE, era máxima. El ministerio hasta ahora ostentado por Podemos ha sido un quebradero de cabeza para el líder del Ejecutivo, que ha decidido amarrar en corto la materia con una persona sin estridencias.
«Te deseo que te rodees del mejor equipo, que nunca te dejen sola, que tengas valentía para incomodar a los amigos de 40 y 50 años del presidente del Gobierno«, disparó por última vez Montero, este martes, durante el tradicional acto de traspaso del maletín ministerial. La nueva distinción que tendrá el Ministerio de Igualdad quedó patente a los segundos de tomar Redondo la palabra, pronunciando un discurso institucional y progresista sin olor a napalm.
«Es una persona muy leal que no causará problemas a Sánchez y, seguro, cumplirá el paso que el presidente marque», destacan en conversación con EL ESPAÑOL fuentes del PSOE vallisoletano. Ana Redondo ha sido durante los últimos ocho años la mano derecha de Óscar Puente, flamante ministro de Transportes, en el Ayuntamiento de Valladolid. Su destacado trabajo al frente del área de Cultura del consistorio, unido a su estrecha relación con Puente y Óscar López, director del Gabinete de Sánchez, explican su designación.
Fue el plenipotenciario ministro Félix Bolaños quien la llamó días antes para comunicárselo. «Es un reconocimiento al trabajo realizado durante mucho tiempo», celebra consultado por este periódico Luis Vélez, hasta ahora concejal de Espacio Urbano y Movilidad del ayuntamiento pucelano. «Lo que ha hecho al frente de Cultura en el Ayuntamiento ha tenido relevancia a nivel nacional», incide otra de las piezas clave de Puente como alcalde de Valladolid. ¿Qué destacaría de su compañera? «Su talante dialogante y su optimismo», contesta, «además, insisto, de su capacidad de trabajo».
La otra fuente del PSOE de Valladolid consultada argumenta las «ganas» de muchos sectores socialistas por recuperar Igualdad tras la «mala experiencia» con Irene Montero. Sin embargo, se sorprende de la elección de Redondo por considerarla «muy conservadora» en algunos aspectos. «Ella siempre se ha dedicado al Derecho y a la Cultura y nunca ha gestionado temas de Igualdad», añade. «Es un perfil un poco plano, algo quizás necesario después de Montero».
Las fuentes del PP castellano y leonés consultadas inciden en ideas parecidas. «Nos ha sorprendido porque ella nunca ha tenido ningún cargo en Igualdad. Ha sido la mano derecha de Puente, pero tampoco era muy conocida en la ciudad. Hay que reconocer que su etapa ha sido buena en cuanto a discurso», argumentan. «Ha tenido mucho que ver ahí Óscar López», deslizan.
Ana Redondo e Irene Montero se traspasan la cartera de Igualdad este martes. Eduardo Parra EP
Tras la publicación de su nombre, su pasado fue rastreado con lupa por el feminismo más radical vinculado a Podemos, que practicó una limpieza de sangre feminista sobre un ministerio del que han hecho bandera.
En la red social X (antes Twitter), pronto afloraron imágenes junto a tallas religiosas de cristos y vírgenes. Fueron dos las que más circularon: una junto a Jesús Julio Carnero, actual alcalde popular de la ciudad (y que ilustra este artículo), en una salida procesional; y otra junto a la Virgen de San Lorenzo, ataviada con un tradicional traje de churra.
Siendo la Semana Santa y sus cofradías un elemento socialmente vertebrador en Valladolid, las pistas que deja Redondo a su paso son las de una mujer institucionalmente comprometida. Todas sus declaraciones y sus actos han sido de compromiso con este sector. Y su relación con la Iglesia, al menos en su ciudad, al menos durante las dos últimas legislaturas, cuanto menos, de cierto afecto.
«La foto fue con motivo del día floral que celebramos a la virgen todos los años y a los que ella, como concejal que ha sido, siempre acudía», cuenta el párroco de la Iglesia de San Lorenzo, Jesús Álvaro Sancho. «Lo del traje fue por una pequeña gala que celebramos para colaborar con el tema tradicional, queríamos que tuviera ese corte para celebrar una ofrenda a la Virgen de San Lorenzo, como se hace en muchos pueblos», relata.
¿Cómo era en el trato? «Siempre ha sido especialmente cercana con nosotros, y muy simpática». ¿Y es practicante, padre? «Eso ya no lo sé, nunca lo he hablado con ella, pertenece a su esfera privada», contesta correctísimo el sacerdote.
Puente, Redondo, el cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, y otros miembros de la archidiócesis y del equipo municipal acudieron en noviembre de 2021 al Vaticano para invitar al Papa Francisco a la Semana Santa de Valladolid. La recepción supuso para la entonces concejala de Cultura «un viaje en lo espiritual fabuloso», según confesó en una entrevista para Valladolid Plural. «Conocer al Papa Francisco fue un momento inolvidable ya que es un Papa asequible, muy sencillo y nos encontramos muy bien en esa visita», se congratuló.
Zorrilla’s Fest y Fundación Triángulo
Todas las opiniones apuntan en la misma dirección. La acción de Redondo estará guiada por patrones más ligados al feminismo clásico que representa la exvicepresidenta Carmen Calvo dentro del PSOE y se alejará del corte y las políticas de choque que, hasta ahora, habían capitaneado Montero y Ángela Rodríguez Pam, recién destituida en su cargo de secretaria de Estado de Igualdad, al frente del Ministerio de Igualdad.
Se descartan, por tanto, leyes de enorme polémica como la del Sólo sí es sí —cuyas consecuencias fueron la excarcelación o rebajas en la pena de más de un millar de agresores sexuales— o la Ley Trans —que acabó fracturando en dos a un movimiento feminista tradicionalmente unido—. Además, Redondo tampoco es el epicentro de una lucha de poder en el seno de ninguna formación política.
Ana Redondo, ministra de Igualdad, vestida con el tradicional traje de churra junto a la Virgen de San Lorenzo de Valladolid. E.E.
Doctora en Derecho Constitucional y profesora en la Universidad de Valladolid, tras perder el PSOE de Puente la vara de mando, este curso había vuelto a dar clases en la Facultad de Derecho tras varios años centrada en la política local. Redondo comenzó su andadura en el seno del PSOE como secretaria de Formación local (2000-2003) y se estrenó el cargo público en 2007, tras salir elegida como procuradora en las Cortes de Castilla y León, un cargo que ostentó hasta 2015; algunos de esos años, como portavoz del grupo.
Tras aquella etapa autonómica, aterrizó en el Ayuntamiento de Valladolid para abrir su fase más notoria. Citada su buena relación eclesiástica, también cabe destacar el buen sabor de boca que ha dejado en los sectores LGTBI de la ciudad. «Es una persona cercana, con un discurso mucho más amable que el que tenía Podemos», ha destacado esta semana en El País Yolanda Rodríguez, responsable de la Fundación Triángulo, una entidad feminista y proLGTBI.
Rodríguez valora «su apoyo incuestionable a los derechos LGTBI» durante estos años. Fruto de esta colaboración entre concejala y asociación, nació en 2022 el Zorrilla’s Fest, unas jornadas culturales con los derechos de este colectivo en el centro del debate y que, este año, se abrió con la presentación del libro Por rojos y maricones del autor Nacho Esteban.
Se trata de un festival cultural «en apoyo a la diversidad, la pluralidad, el progreso, la modernidad y los avances sociales para todas las personas» amparado por Redondo, que también apoyó el crecimiento del Festival CinHomo, una muestra internacional de Cine y Diversidad Sexual.
