En caso de que los hechos hubiesen ocurrido realmente ya habrían prescrito.
La fiscalía de Múnich informó este martes de que ha archivado la investigación contra el difunto papa Benedicto XVI por posible complicidad en abusos en el arzobispado de Múnich y Freising al no existir «sospechas suficientes» de actuación delictiva» que, en caso de haberse dado, ya habría prescrito.