El presidente de la Conferencia Episcopal había asegurado que «el crimen del aborto ensombrece la historia de la humanidad» La titular de Igualdad subraya que «no le sorprende» la posición de la Iglesia en esta materia
La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, ha afirmado en relación con la reforma de la ley del aborto que a la Iglesia Católica le corresponde decir "qué es pecado, pero no qué es delito" y al Gobierno elaborar leyes que afecten "a toda la ciudadanía" con "respeto" a todas las posiciones. Salía así al paso de las afirmaciones del presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco, que había asegurado que la democracia no puede funcionar bien como mero juego de mayorías y minorías con independencia de su sustrato ético.
Para la ministra, el Ejecutivo ha afrontado "con serenidad, con sosiego y con diálogo" la reforma de una normativa que equipare a España con el resto de países de su entorno y que lo hará "sin tener en cuenta criterios religiosos o criterios extremos" aún a sabiendas de que en esta materia no se puede "contentar a todo el mundo". La titular de Igualdad, que ha subrayado que "no le sorprende" la posición de la Iglesia en esta materia, ha indicado que el Gobierno prevé tener listo el anteproyecto de ley antes del verano e iniciar posteriormente su tramitación parlamentaria.
La ministra se escuda en los expertos
A su juicio, la nueva ley será "más segura, sensata y equilibrada" que la actual, ofrecerá garantías jurídicas a las mujeres que decidan interrumpir su embarazo y a los profesionales que las atiendan y establecerá límites "donde actualmente no los hay", como en el caso de riesgo para la salud de la madre, supuesto al que se acogen el 97% de las mujeres que abortan. Según Aído, los informes de los comités de expertos constituidos para afrontar la reforma establecen "claramente" la necesidad de modificar la ley de forma que incida en cuestiones relacionadas con la salud sexual y reproductiva, una mayor información afectivo-sexual y la prevención de embarazos no deseados.
La ministra de Igualdad ha hecho estas afirmaciones tras mantener un encuentro con un centenar de mujeres del programa 'Tiempo Propio' que organiza el Instituto Asturiano de la Mujer en veintitrés municipios de menos de 50.000 habitantes y en el que participan actualmente 1.500 mayores de cincuenta años. En su intervención, Aído se ha referido además a la futura ley de igualdad de trato, que confía en que se apruebe en esta legislatura, y que promoverá la lucha contra toda forma de discriminación bien sea por razones étnicas, de discapacidad, de orientación sexual o de edad. Según la titular del departamento de Igualdad, la nueva normativa abordará "todos los aspectos en los que exista discriminación, especialmente en el ámbito del trabajo y del acceso a bienes y servicios".