El polémico teólogo católico, Hans Küng, alertó hoy del riesgo de que la iglesia católica se convierta en una secta y denunció las posiciones conservadoras del Papa Benedicto XVI así como su decisión de rehabilitar a cuatro obis
"La Iglesia corre el riesgo de convertirse en una secta. Muchos católicos no esperan nada de este Papa. Y eso es muy doloroso", afirma el teólogo alemán en una entrevista que hoy recoge el diario vespertino "Le Monde".
Según Küng, lo primero que tendría que hacer el Pontífice es reconocer que la iglesia católica atraviesa una "crisis profunda" y, después, podría hacer "gestos", como corregir la encíclica que prohíbe todo tipo de contracepción, y podría decir mañana mismo: "Derogo la ley del celibato para los curas".
En su opinión, el Papa es "mucho más poderoso" que el presidente de Estados Unidos porque no tiene que rendir cuentas ante un Tribunal Supremo.
En el caso de Benedicto XVI, Küng considera que es un hombre que siempre ha vivido en el medio eclesiástico, que ha viajado muy poco y ha permanecido encerrado y alejado de las críticas en el Vaticano, lugar que comparó con el Kremlin.
El teólogo considera además que el Papa "tiene una posición ambigua sobre los textos del Concilio (Vaticano II) porque no se siente cómodo con la modernidad y la reforma".
También le parece "escandaloso" que, coincidiendo con el 50 aniversario del lanzamiento del Concilio por el Papa Juan XXIII, el Pontífice actual haya decidido revocar la excomunión a personas opuestas a ese Concilio.
Küng se refiere al negacionista Richard Williamson y otros tres obispos seguidores del cismático ultraconservador Marcel Lefebvre, a quienes Benedicto XVI levantó recientemente la excomunión que pesaba sobre ellos desde hacía 20 años.
Esa decisión del Papa, añadió, no responde a "un fallo de comunicación o de táctica, sino que constituye un error del Gobierno del Vaticano".
Fue el Vaticano el que le quitó a Küng la autorización para enseñar teología católica en 1980 después de que éste cuestionase el dogma de la infalibilidad papal.
Desde entonces, Küng, que ha permanecido dentro de la iglesia católica aunque suspendido como teólogo católico y como sacerdote, está dedicado a fomentar el diálogo entre las religiones.