El Gobierno catalán pide al futuro ejecutivo de Zapatero buscar un consenso con la comunidad educativa y las comunidades autónomas
El departamento de Enseñanza de la Generalitat ha decidido suspender en Cataluña la aplicación de los preceptos de la Ley de Calidad que debían entrar en vigor el próximo curso, entre ellos el incremento de las horas de enseñanza del castellano, a la espera de la reforma o derogación de esta norma. La consellera de Enseñanza, Marta Cid, ha informado hoy en conferencia de prensa de que con esta medida pretende dar respuesta a la «incertidumbre» originada en torno a la aplicación de esta ley tras la victoria electoral del PSOE, que ya ha anunciado también que piensa paralizar su aplicación.
El gobierno catalán pide al futuro ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero una moratoria mínima de dos años de la aplicación de la Ley de Calidad y la derogación de los decretos que la despliegan para buscar un consenso con la comunidad educativa y las comunidades autónomas sobre el futuro marco educativo en España. Marta Cid ha destacado que mantener la aplicación de la LOCE (Ley Orgánica de Calidad de la Educación) «no beneficia a nadie», hubiera provocado «muchos inconvenientes» y «dificultaría posibles cambios en el futuro», lo que la ha convencido a optar por esta suspensión ya que «no podemos actuar como si nada hubiera pasado», en referencia a la derrota electoral del PP.
…
La suspensión de la aplicación de los decretos de la ley supondrá también, de momento, aplazar los nuevos itinerarios para la ESO (Educación Secundaria Obligatoria), la prueba de bachillerato y el nuevo sistema de evaluación de los alumnos, que obligaba a repetir curso si se suspendían más de dos asignaturas. Este departamento ha paralizado además los cambios sobre la enseñanza de la Religión, que continuará siendo una asignatura voluntaria para los niños y de oferta obligatoria para los centros, así como los que afectaban a la elección del director de centro.