El domingo 9 de junio elegiremos a nuestros representantes en el Parlamento Europeo, órgano legislativo de la Unión Europea, a la que España pertenece desde 1986. Estas elecciones no tienen la carga emocional de las más próximas, locales, autonómicas y estatales, pero son importantes porque la legislación europea debe trasladarse a los Estados miembros. Y son fundamentales para España porque la restauración borbónica que siguió a la dictadura franquista no modificó muchos de sus elementos confesionales, que seguimos padeciendo hoy.
Por ello Europa Laica recuerda a los partidos candidatos que sus programas deben contener elementos básicos para avanzar hacia la libertad de conciencia y la laicidad:
Derogar los concordatos vigentes en la Comunidad Europea, en general, y los Acuerdos de 1979 con el Estado Vaticano en España, en particular.
Acabar con el trato privilegiado de las organizaciones religiosas, que deben ser consideradas como cualquier asociación privada.
Eliminar la financiación de las religiones con fondos públicos.
En España, recuperar los bienes apropiados por la Iglesia católica por el procedimiento de la inmatriculación.
Defender la enseñanza pública, laica, y dejar de financiar los centros educativos confesionales.
Impulsar una Carta Europea por la Laicidad y la Libertad de Conciencia que garantice estos derechos en todo el ámbito europeo, en condiciones de libertad e igualdad, sin privilegios ni discriminación, de acuerdo con la DUDH. Europa Laica dispone de una propuesta articulada para dicha Carta.
Europa Laica recuerda a la ciudadanía que las confesiones religiosas hacen lobby en Bruselas para mantener y aumentar sus privilegios. La laicidad de las instituciones públicas es una cualidad intrínseca en cualquier democracia, imprescindible para defender la libertad de conciencia de la ciudadanía y la separación entre gobiernos y religiones.