Las periodistas Marta García Carbonell y María Palau Galdón publican ‘Indignas hijas de su patria. Crónicas del Patronato de Protección a la Mujer en el País Valencià’, editado por la Institució Alfons el Magnànim
Castigos, pruebas de virginidad, trabajos forzosos, celdas de aislamiento y mucha moral católica. El franquismo creó el Patronato de Protección a la Mujer —con la esposa del dictador, Carmen Polo, como presidenta de honor—, una institución que propició el encierro de un número incalculable de menores de edad en conventos a modo de reformatorios. “Los motivos del internamiento fueron muchos y muy diversos, desde portarse mal hasta ir de la mano de un chico o fumar por la calle”, explica la periodista Marta García Carbonell (Gandia, 1999), autora junto con María Palau Galdón (Bicorp, 1999) de Indignas hijas de su patria. Crónicas del Patronato de Protección a la Mujer en el País Valencià, editado por la Institució Alfons el Magnànim tras obtener la ‘Beca de periodismo de investigación Josep Torrent’ que otorga la Unió de Periodistes Valencians.