El acusado tapaba a las niñas los ojos con una bufanda con el pretexto de que adivinarán que dedo les introducía en la boca.
La Policía Nacional detuvo a primeros de septiembre a un pastor ecuatoriano de 50 años de la congregación evangélica Maranatha de Getafe acusado de abusar sexualmente de cuatro niñas de 10, nueve, siete y seis años de edad. El arrestado tapaba los ojos a las niñas con una bufanda con el pretexto de jugar al patito ciego para que pudieran adivinar que dedo era el que les introducía en la boca. Sin embargo, las niñas manifestaron que «les metía algo grande de mal olor y les pedía que movieran la lengua de un lado a otro».
El pastor fue detenido por los agentes de la UFAM y quedó en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juez. Está acusado de un delito de abuso sexual.
El acusado pedía a las niñas que guardaran el secreto del juego y les ofrecía a cambio recompensas y regalos. Los abusos se han cometido desde el año pasado en la oficina del detenido con la puerta cerrada y en la parte de atrás de su vehículo. Sucedían habitualmente tras el culto de los viernes.
El caso salió a la luz a finales de agosto cuando una niña le contó a su madre que el pastor les obligaba a jugar a un entretenimiento que no le gustaba. Le relató que tras el culto el pastor le invitaba a la oficina donde le decía que iban a jugar al patito ciego. La menor también contó que otras niñas habían pasado por la misma situación desde finales del año pasado hasta este verano. Los padres de las menores acudieron a la comisaría para denunciar al pastor evangelista.
Fuentes próximas al caso refieren que la defensa corre a cargo del despacho penalista Ospina Abogados que ha renunciado hacer manifestaciones.