La opinión del Observatorio
· Podemos interpretar gracias a esta noticia que Ciudadanos no estima que la aconfesionalidad del Estado sea de importancia en su programa electoral. Esperamos que nuestros lectores tomen nota a la hora de ejercer su derecho al voto.
· Insistimos: el laicismo no es antirreligioso – como pretenden señalar algunos partidos políticos – ni se quieren borrar ningunas «raíces cristianas». El objetivo del laicismo es la separación entre las creencias y los particularismos de lo público.
El concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Gijón Rubén Pérez Carcedo ha considerado este martes «absurdo e innecesario» pretender hacer un reglamento municipal de laicidad como propone el Gobierno local.
Según Pérez Carcedo, porque el Ayuntamiento no tiene ningún tipo de competencia en la materia y, sobretodo, porque el ordenamiento jurídico ya asegura la neutralidad de las instituciones frente al hecho religioso y garantiza la libertad de conciencia, «que es lo que constituye la verdadera laicidad», según una nota de prensa de la formación naranja.
A su modo de ver, es ya significativo que tan solo uno de los más de 8.000 municipios que hay en España considerado necesario regular esta materia.
Es por ello, que cree que el verdadero objetivo del Gobierno local con este reglamento no sería otro que pretender «imponer su ideología y suprimir cualquier aspecto que les suene a religión, especialmente católica, de la vida pública de la ciudad, como si la religión no fuera un asunto público con claras dimensiones sociales y culturales», ha advertido.
«Por mucho que se empeñen, no se pueden borrar ni ocultar las raíces cristianas de nuestra sociedad», ha apuntado Pérez Carcedo, quien ha pedido respecto respeto político e institucional en este asunto.
A esto ha añadido que pretender, por ejemplo, que los representantes públicos no puedan participar en ningún acto religioso, no solo vulneraría sus derechos individuales, sino que, además, supone confundir una presencia institucional con una adhesión a un credo concreto, cuanto simplemente constituye una muestra de respeto y la participación en un acto ciudadano como se participa en tantos otros.