El autor del mural en favor de Pablo Hasél, Roc Blackblock, ha criticado este martes la condena del rapero y el hecho de que su retrato crítico del rey emérito Juan Carlos I fuera borrado ayer por los servicios de limpieza de Barcelona: «Las ideas no se encarcelan, sino que se discuten«.
En declaraciones a EFE-TV, Rock Blackblock ha recordado la frase que figura en un mural que él mismo pintó para el Ayuntamiento de Barcelona el año pasado, como un alegato en favor del diálogo.
«Es algo que deberían recordar y de algún modo hacerlo llegar a sus operarios y a la gente que tenga la capacidad para tomar estas decisiones«, ha comentado el artista con relación al hecho de que una brigada de BCNeta, custodiada por la Guardia Urbana, borrara ayer el mural que había pintado en la plaza de Les Tres Xemeneies.
El artista considera que lo ocurrido fue «un acto de censura en toda regla» y no consigue entender los motivos que han llevado a tapar el retrato, aunque, posteriormente, el Ayuntamiento de Barcelona le ha pedido disculpas y le ha ofrecido los medios para volver a pintar el mural.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y varios concejales han declarado que no fue «una intervención política» promovida desde el consistorio, un hecho que, para el autor del mural, genera nuevos interrogantes y nuevas dudas.
«Si ya hubiese sido preocupante que saliera del Ayuntamiento de Barcelona una orden de censura, el hecho de que no salga, pero se ejecute desde operarios del ayuntamiento, nos parece también altamente preocupante porque eso indica que hasta cierto punto hay un descontrol», asevera.
El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que se hará cargo de los gastos de restituir el mural en apoyo de Hasel, pero Blackblock aún no ha tomado una decisión al respecto y valora la posibilidad de recuperarlo después de las elecciones para evitar que los partidos políticos saquen rédito del tema.
El rapero Pablo Hasél debe ingresar en prisión esta semana para cumplir condenas por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la corona, lo que ha reabierto el debate sobre los límites de la libertad de expresión.
«En cualquier caso -ha reflexionado-, esto no ha empezado con este mural, sino que viene de mucho antes. Viene del caso de ‘El Jueves’, de Valtònyc, de Pablo Hasél, del libro ‘Fariña’ y de un montón de casos de censura«, ha reflexionado, quien cree que se trata de «una reivindicación comunitaria y global».
