El Ejecutivo andaluz aprovecha la crisis sanitaria para aprobar un decreto ley que “garantiza impunidad a las emisiones piratas»
Este jueves el parlamento de Andalucía ha dado luz verde al Decreto Ley 2/20 de Mejora y Simplificación de la Regulación para el Fomento de la Actividad Productiva en Andalucía. Una decisión que se ha realizado aprovechando la crisis de coronavirus y sin rendir cuentas ante los colectivos profesionales, los sindicatos de trabajadores, las facultades de comunicación y las oenegés que pedían abiertamente la paralización del decreto para no romper el consenso alcanzado en la Ley Audiovisual de 2018 y dejar “tocado de muerte” al sector audiovisual.
Estos colectivos sostienen que con este Decreto, “lejos de proteger el espacio radioeléctrico, se permite a las empresas anunciarse en emisoras ilegales e incluso permite emitir campañas institucionales derivadas por agencias de publicidad sin que sean sancionadas”. Una norma que “garantiza impunidad a las emisiones piratas que merman la capacidad de ingresos por publicidad de las emisoras legales”, sostienen, en clara referencia a las emisoras sin título habilitante de la cadena COPE que el Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla se comprometió a cerrar en diciembre de 2019.
ElPlural.com ha venido publicando las últimas noticias relacionadas con este debate, publicando en exclusiva el documento en el que el Ejecutivo andaluz de comprometía a cerrar estas “cadenas piratas”: Cope+ Granada, Cope+ Málaga, Cope+ Córdoba, Rock FM Córdoba y Rock FM Marbella. El escrito, fechado a 13 de diciembre de 2019, está firmado por Marta Olea, directora general de Comunicación de la Junta de Andalucía.
Un compromiso ambicioso, que supondría que un auténtico varapalo para COPE, ya que no solo perdería la quinta parte de su audiencia total a nivel nacional, sino que Carlos Herrera dejaría de escucharse en su propia tierra. Pero como pudo comprobar este periódico, al margen de las emisoras que la Junta de Andalucía se comprometió a cerrar, el listado de emisoras que operan de forma presuntamente ilegal, sin título habilitante y desde frecuencias que no existen es más alargado: Cadena 100 Almería, Rock FM Almería, COPE Almanzora, COPE Córdoba, Rock FM Córdoba, COPE + Córdoba, COPE + Granada, Cadena 100 Huelva, COPE Málaga, Megastar FM Málaga, Rock FM Málaga, Rock FM Marbella, COPE Marbella, Rock FM Axarquía, Cadena 100 Écija y COPE + Sevilla.
El “capo andaluz” perdona “400 millones” y “regala cientos de emisoras”
El enfado no solo se ha expresado en forma de comunicado desde la Asociación Española de Radiodifusión Comercial (AERC). A la AERC se han sumado 13 organizaciones sociales, académicas y profesionales alertando “sobre la desregulación en un sector que provocará más privatizaciones, competencia desleal, intrusismo laboral y carta blanca a las emisiones piratas y menos pluralidad informativa”, además de tener un impacto negativo en el empleo de un sector audiovisual andaluz que queda “tocado de muerte”.
También los partidos de la oposición han condenado este decreto. Tanto PSOE como Adelante Andalucía, que ya llevaron a Bendodo a responder ante dos comisiones de investigación, entienden ambos partidos que este «momento de excepcionalidad no es el más idóneo» para aprobar una norma que modifica 21 leyes y seis decretos.
El enfado también es notorio en la condena pública realizada por José Antonio Abellán, ex director de Deportes de COPE despedido tras 17 años en la cadena después de grandes fichajes como el de Paco González, fue el primero que denunció que estas frecuencias no tenían la autorización para emitir, vulnerando así la Ley General de Telecomunicaciones.
El otrora periodista de COPE se ha expresado en los siguientes términos: “La Conferencia Episcopal ha convencido a Elías Bendodo, capo del PP andaluz, para que en medio de la crisis que vivimos perdone a COPE 400 millones de euros y le regale cientos de emisoras”, ha sostenido a través de un mensaje desde su cuenta personal de Twitter, en el que ha sentenciado explicando que este servicio puede haberse realizado “a cambio de un buen paquete de dinero negro de la caja de Unicaja Banco de Adolfo Arjona”.