Desde Izquierda Unida hemos reclamado históricamente que se supriman las exenciones fiscales a la Iglesia por suponer un trato de favor inaceptable, así como la derogación de los Acuerdos con la Santa Sede de 1979. Pero ahora que todas las administraciones e instituciones van a hacer un importante y necesario esfuerzo para hacer frente a la crisis económica derivada de la emergencia sanitaria del COVID-19, consideramos fundamental que la iglesia se sume a dicho esfuerzo aportando la parte correspondiente de lo que ingresa por la gestión del patrimonio que no dedica a la práctica religiosa y que le reportan beneficios económicos.
La Iglesia posee una gran cantidad de propiedades y muchas de ellas nada tienen que ver con las prácticas religiosas, desde garajes y lonjas hasta viviendas, hostales y otras muchas propiedades destinadas a actividades lucrativas. Son estas últimas las que entendemos deben contribuir a las arcas municipales con el pago del IBI y solicitamos al PSOE comience a girarle los correspondientes recibos.Además en la actualidad tenemos el sustento legal necesario para así hacerlo, en base a la Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de 2017 que resolvió en favor del Ayuntamiento de Getafe su litigio con las Escuelas Pías para el cobro de 26.000€ del ICIO. El fallo de la misma sostiene que otorgar un beneficio fiscal a la iglesia cuando realiza actividades sujetas a rendimiento económico va en contra del Tratado de la UE porque vulnera la libre competencia. Deduce que “La Iglesia católica está obligada a pagar tributos en actividades que comporten rendimiento económico y su exención es considerada una ayuda de Estado expresamente prohibida por el Tratado de la UE”
La sentencia permitiría así una interpretación extensiva al resto de impuestos en situaciones análogas, como es el caso del IBI, y ciudades como Valencia, Zamora, Valladolid, Córdoba, Rivas VaciaMadrid, Tarragona, Badalona, Móstoles, León, Ronda ya están dando pasos en este sentido.
El propio Acuerdo con la Santa Sede de 1979 pacta la exención eclesiástica para inmuebles dedicados al culto y labores pastorales o benéficas, pero nada dice de las actividades lucrativas sujetas a rendimiento económico.
En nuestra ciudad ya se intentó girar este impuesto a la Iglesia, pero en 2014 el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Burgos obligó al Ayuntamiento de Miranda de Ebro a devolver a la Congregación de Sagrados Corazones el importe del IBI cobrado por su Hospedería en base a la Ley de Mecenazgo de 2002. Pero con esta sentencia de 2017 esta no sería de aplicación ya que dicha Ley de Mecenazgo recoge en su artículo 1.3 “…sin perjuicio de lo dispuesto en los tratados y convenios internacionales que hayan pasado a formar parte del ordenamiento interno, de conformidad con el artículo 96 de la Constitución Española”
Por lo tanto, teniendo además en cuenta que la normativa comunitaria tiene fuerza de ley para los estados miembro y es de aplicación directa, la exención tributaria de aquellas propiedades cuya actividad está sujeta a rendimiento económico no se ajusta a derecho y en base a esa circunstancia es potestad del Ayuntamiento de Miranda de Ebro girar los correspondientes recibos de IBI.
Ya en 2014 se calculó en 89.000€ lo que dejaba de ingresar el Ayuntamiento por propiedades eclesiásticas que no pagaban IBI por dicha exención, cifra que debería revisarse y re-calcular.
Por todo ello y entendiendo que dada la jurisprudencia estamos ante una cuestión de voluntad política, desde IU Miranda de Ebro proponemos:
- 1.- Se redacte un informe detallando las propiedades de la iglesia en el término municipal sujetas a actividades que reporten rendimiento económico y el cálculo económico del IBI correspondiente a las mismas
- 2.- Se comience el trámite necesario para girar los recibos de Ibi a dichas propiedades
- 3.- Se supriman las exenciones en el resto de impuestos municipales de las que dichas propiedades puedan estar siendo beneficiadas.
IZQUIERDA UNIDA MIRANDA
En Miranda de Ebro a 30 de Marzo de 2020
