La ley prevé registrar como estatales la mayoría de los inmuebles y propiedades de las comunidades religiosas en el pequeño país balcánico.
Cientos de sacerdotes y monjes de la Iglesia ortodoxa serbia en Montenegro protestaron este martes en Podgorica contra una controvertida ley que prevé registrar como estatales la mayoría de los inmuebles y propiedades de las comunidades religiosas en el pequeño país balcánico.
La marcha tuvo lugar ante la sede del Parlamento de Montenegro, donde un comité legislativo dio hoy su visto bueno para el debate sobre la norma que comenzará esta misma semana.
Amfilohije, el jerarca del Arzobispado de la Iglesia ortodoxa serbia en Montenegro, instó en la protesta a los diputados a no permitir la aprobación de un proyecto de ley sobre el que -asegura- no ha habido consultas con la propia Iglesia.
El pasado sábado unas 6.000 personas se manifestaron en Niksic, al norte de Podgorica, para exigir la retirada del proyecto de ley.
Los popes protestan por las calles de Montenegro /
La llamada «Ley de Libertad Religiosa» incluye una provisión para registrar como «bienes públicos» todos los inmuebles y propiedades de las comunidades religiosas, a menos que se presenten documentos que confirman que ya eran propiedad de la Iglesia antes de 1918, cuando Montenegro se integró en el entonces Reino de Yugoslavia.
Si no existe esa evidencia se considera que esos bienes son estatales y serán registrados como «herencia cultural de todos los ciudadanos».
La Iglesia ortodoxa de Montenegro cuenta con el apoyo del prorruso «Frente Democrático», el principal partido de la oposición, y de varios partidos proserbios que en los días pasados aseguraron que bloquearían la votación.
El presidente montenegrino, Milo Djukanovic, hombre fuerte del país desde hace 30 años, ha denunciado que las protestas buscan forzar que el país renuncie a su futuro en la Unión Europea (UE) y en el eje euroatlántico en favor de una «ilusión nacionalista».
La Iglesia ortodoxa es dominante en este pequeño país, de unos 620.000 habitantes, que se independizó en 2006 del Estado común que formó con Serbia tras la desintegración de Yugoslavia.
Los partidos opositores de Montenegro también se opusieron al ingreso del país en la OTAN en 2017.