La Consejería de Educación, Universidad e Investigación del Govern de les Illes Balears, Martí Xavier March i Cerdà (PSIB_PSOE) y la Comisión Islámica de España en Baleares firmaron la semana pasada un convenio de colaboración con el objetivo de articular las condiciones en las que se tiene que desarrollar la impartición de la enseñanza de la religión islámica en los centros docentes sostenidos con fondos públicos.
Las Illes Balears eran, según el Estudio Demográfico de la Población Musulmana, al día de hoy, junto con Cataluña, La Rioja, Madrid, Murcia, Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha, una del total de las siete comunidades autónomas que no impartían la asignatura de religión islámica.
O sea que a la asignatura de la religión católica hay que sumarle ahora la religión musulmana de la mano de un partido que históricamente ha hecho uno de sus principios lograr una escuela pública laica.
Sino veamos lo siguiente:
1)El programa electoral con el que se presentó el PSOE a las elecciones generales del año 2015, en el apartado educación, decía: “Promover una escuela pública laica donde no quepa la integración de enseñanzas confesionales, ni en el currículum ni en el horario escolar. Para ello se promoverá las reformas del marco legal actual necesarias, así como de los acuerdos internacionales. Promover la incorporación de la enseñanza cultural sobre el hecho religioso en términos de integración y convivencia, como parte de nuestro patrimonio cultural, evitando, por ignorancia, los riesgos de los fundamentalismos”.
2)El programa electoral con el que se presentó el PSOE a las elecciones generales del año 2016 tenía la misma propuesta idéntica.
3)En el mes de julio del pasado año 2018, tres años después la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, (PSOE) aseguraba, en una entrevista concedida a una diario de tirada nacional, que su intención era crear una asignatura obligatoria de “valores cívicos y éticos” y que la Religión dejara de contar para la nota de Bachillerato, “La religión no puede tener valor académico y contar para la nota media” aseguraba Celaá, quien defendió que todos los alumnos han de cursar “valores cívicos”.
4)El programa electoral con el que se presentó el PSOE a las elecciones generales del 28 de abril del año 2019, en el apartado referido a la educación decía: “Prohibiremos la escolarización con criterios de segregación en los centros sostenidos con fondos públicos”.
5)De cara a las próximas elecciones generales del día 10 de noviembre el propio secretario general del PSOE y actual Presidente en funciones ha declarado que: “La concepción laica del Estado es una seña de identidad del ideario político del socialismo”.
Casan muy poco las propuestas de laicidad y programar más clases de religión en horario escolar y que provocarán a buen seguro otro cauce de segregación en los alumnos por razón de creencia religiosa (y sino al tiempo), o es que, desgraciadamente, el Govern Balear no conoce sus propias propuestas programáticas y de gobierno como partido.
Manuel Pascual Aguiló
