Los feligreses de Venialbo han devuelto a su querido Cristo de la Vera Cruz a su ermita, un templo de pequeñas dimensiones en la parte alta del pueblo donde habitualmente descansa esta imagen, que a lo largo del último año ha permanecido en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción por seguridad, ya que el Obispado de Zamora llevaba a cabo en la ermita obras de consolidación de una parte del tejado, concretamente la que protege el altar.
Los trabajos han concluido justo a tiempo para que las procesiones de Semana Santa de Venialbo puedan celebrarse en su habitual itinerario, ya que la tradición de este pueblo dicta que las tres cofradías recojan en su ermita al Cristo de la Vera Cruz el Jueves Santo y que este permanezca en la parroquia hasta el Domingo de Resurrección.
La celebración de la Pasión, sin embargo, comenzará en Venialbo pasado mañana, Domingo de Ramos, con la bendición de los laureles y la típica procesión alrededor del templo. La misa comenzará a las 13.15 horas.
Venialbo cuenta con tres cofradías o hermandades penitenciales: la del Cristo de la Vera Cruz, que tiene como imagen titular al crucificado devuelto el pasado sábado a su ermita, la Hermandad de Penitencia, con otro Cristo como imagen titular, y la Cofradía de la Virgen Dolorosa. Las tres participan en la procesión del Jueves Santo, que saldrá a las 18.30 horas de la iglesia de La Asunción hacia la ermita de la Vera Cruz y volverá con el Cristo al templo de salida.Una vez de vuelta tanto el alcalde, Jesús Vara Colino, como el juez de paz de Venialbo dejarán sus respectivos bastones de mando junto al Monumento, donde permanecerán durante todo el Triduo Pascual, una vieja tradición que esta villa no ha querido perder.
Los oficios del Viernes serán a las ocho de la tarde y después saldrán de nuevo en procesión las tres cofradías, con la Dolorosa y el Cristo de la Penitencia, con un recorrido más largo que el día anterior.
La Vigilia Pascual del Sábado Santo se celebrará en la iglesia de Sanzoles a las 22.30 horas. Lo que sí habrá en Venialbo será la Eucaristía del Domingo de Resurrección, a las 11.15 horas, tras la cual saldrá la procesión del Encuentro en la que la Virgen perderá su manto de luto. Para terminar, el Cristo de la Vera Cruz regresará otra vez a su ermita, ahora sí, para quedarse allí hasta la Semana Santa de 2020. Las obras de restauración finalizadas en la ermita de la Vera Cruz no son las únicas previstas en Venialbo por el Obispado de Zamora, pues «muy pronto» comenzarán los trabajos de un proyecto mucho más ambicioso en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, financiadas con ayuda de la Diputación de Zamora, según informa el alcalde de la localidad, Jesús Vara Colino.
El proyecto de restauración incluye el arreglo de la techumbre y la consolidación de la espadaña del campanario. Este último punto es una vieja demanda del Ayuntamiento de Venialbo, que en los últimos años ha insistido mucho en la necesidad de arreglar la torre ya que su precario estado de conservación, unido a la presencia de nidos de cigüeñas en la misma, hacían temer por el desprendimiento de cascotes a la plaza, que podrían haber supuesto un peligro para los peatones en un momento dado. Un riesgo que desaparecerá una vez concluidas las obras.
Las mejoras en la iglesia de Nuestra Señora de La Asunción no son importantes para Venialbo solamente, sino para toda la Diócesis de Zamora, concretamente para salvaguardar su patrimonio, ya que este templo acoge un retablo y varias piezas religiosas de gran valor artístico que han estado expuestas en distintas ediciones de Las Edades del Hombre.
La desventaja es que los trabajos obligarán a cerrar la iglesia parroquial durante varios meses, por eso el Ayuntamiento de Venialbo ya está pensando dónde celebrar las misas más concurridas, como las que se celebran durante las fiestas en honor a La Asunción y a San Roque.