El dominico Fray Pascual Saturio se muestra contento y satisfecho por la sentencia que se ha conocido este jueves. Tras meses de incertidumbre y preocupación ahora recupera la tranquilidad. El guardian del convento agradecía en primer lugar la labor desempeñada por el letrado que le ha acompañado en todo este proceso, Martín José García Sánchez. «Quisiera darle la enhorabuena a Martín por su trabajo y el de sus hijos y gabinete». Emocionado aún y abrumado por las muestras de cariño Pascual Saturio reconocía que «lo mejor ha sido que se ha refrendado el sentimiento mayoritario de nuestro pueblo y se ha confirmado ese amor hacia la Patrona tan bonito que tenemos en nuestro pueblo. Jesús y María son un vecino más porque ya están en el corazón y lo afectivo».
El dominico insiste en su alegría después de conocer el dictamen del juez. «Estoy muy contento porque es el reconocimiento al sentir de nuestra ciudad de Cádiz mayoritario. Esto llegaba más que nada con ganas de ofender y hacer daño y todas estas cosas a la Virgen pero no se daban cuenta que lo hacían a los gaditanos. Esto ha sido una intranquilidad que rompe la paz que necesitamos todos para nuestro trabajo diario y a partir de hoy se recupera esa normalidad y alegría».
Martín José García Sánchez ha estado al frente de la defensa acompañado por su hijo Javier García Marichal y por todo su bufete. Con ellos han colaborado muchos gaditanos y personas como el historiador Francisco Glicerio que fue uno de los testigos principales en la vista de prueba. El letrado, igualmente agradecido por todas las felicitaciones y el respaldo y las muestras de ánimo que ha recibido de los gaditanos, valoraba muy positivamente la sentencia. «Estoy muy satisfecho porque para mí y todos los cristianos y devotos es el mejor regalo de Navidad que podíamos tener porque esto sienta un precedente de cara a otros reconocimientos en Andalucia donde ya hay muchas medallas concedidas». El abogado gaditano añadía además sobre Europa Laica que «esto era un ensayo y ese ensayo les ha salido mal».
En cuanto a la sentencia en sí misma el letrado asegura que «técnicamente para mí es magnífica porque jurídicamente deja claro que la recompensa es a la labor que, inspirados por la Virgen, hacemos los devotos». Además asegura que «lo de menos era si la medalla era a la imagen o no y ha quedado claro que el Ayuntamiento ha obrado correctamente en la concesión. Esto era un tema de los gaditanos para los gaditanos. No puedo decir más que estoy muy satisfecho porque en esta profesión cuando se sostiene un gran trabajo hay que estar muy satisfecho con el resultado».
Martín José García explica que en efecto cabe un recurso de apelación y reflexiona sobre la sentencia. «No es firme pero entiendo que la sentencia esta muy bien conformada. El juez ha calificado muy bien jurídicamente el tema sin entrar en connotaciones religiosas. Es una recompensa del pueblo de Cádiz, de todos los gaditanos y el ayuntamiento era el portavoz del pueblo de Cádiz. No tiene desperdicio porque es muy correcta y esta distinción se le concede a la labor que hay detrás». Martín se refiere asimismo a los méritos y al trámite de la concesión de la distinción. «El juez tiene en cuenta todos los fundamentos que nosotros sosteníamos. Se trataba de lo que el pueblo de Cádiz hizo inspirado por la Virgen. No se ha vulerado la legalidad en ningún punto y se ha actuado de acuerdo con la normativa del Ayuntamiento. Además esto no va en contra de la Constitución. En España cabemos todos y es una muestra de respeto hacia los tradiciones de Cádiz y hacia su patrona. Es concordia. La Constitución es una norma de convivencia y se ha demostrado una vez más que no se ha incumplido para nada ninguna norma».
En cuanto a la condena en costas Martín apunta que «es lógica y no ha habido duda para el juez ya que la desestimación es íntegra. Respeta todos los derechos de las partes pero ha sido correcto en todo el procedimiento».