Los miembros del sector progresista del Consejo de Administración de RTVE criticaron ayer el número de horas dedicadas a la reciente visita del Papa a Madrid en la parrilla de los canales de TVE. Opinan que la cobertura del viaje de Benedicto XVI con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud católica fue "excesiva" y que eso pudo repercutir en una menor audiencia. Los representantes de los partidos conservadores opinaron, por el contrario, que la atención dedicada al evento fue "la correcta".
Tras un debate, los consejeros acordaron que para que en un futuro no se repita una situación similar los directivos de TVE tendrán que informar previamente al Consejo de Administración de la cobertura que preparan para acontecimientos de este tipo. La comunicación previa requerirá el visto bueno del órgano de gobierno de la corporación.
En lo que sí hubo unanimidad entre los consejeros fue en el elogio a la profesionalidad de los técnicos y periodistas de la cadena pública durante la visita.
Por otro lado, el Consejo de Administración suscribió una declaración de compromiso de mantenimiento de la plantilla y de la actual estructura territorial.
Asimismo, se han establecido los mecanismos para asegurar la presidencia colectiva que el Consejo de Administración decidió poner en práctica después de la dimisión del anterior presidente, Alberto Oliart. Fuentes del organismo indicaron que se han puesto las bases para que la falta de un presidente elegido por las Cortes "se note lo menos posible".
