Izquierda Unida quiere que la educación obligatoria sea hasta los 18 años frente a los dieciséis actuales, una enseñanza totalmente laica y que no haya más de veinte alumnos por clase en primaria y secundaria, medidas que incluirá en su programa electoral para las elecciones de diciembre. La derogación inmediata de la LOMCE y la gratuidad de los estudios son otras de las iniciativas que IU contempla en el proyecto educativo de la formación que este lunes presenta el candidato a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón.
Apuesta también por suprimir gradualmente los conciertos educativos “hasta su completa desaparición” y que el contenido de las materias tengan un contenido “laico, intercultural, inclusivo, igualitario y ecológico”.
De los territorios con lengua propia, IU defiende que la Administración se encargue de proteger y normalizar el uso y el conocimiento de esos idiomas, que será compatible con saber la lengua oficial del Estado y una tercera.
Sobre la enseñanza universitaria, propone también revisar el sistema de titulaciones del proceso de Bolonia para evitar que las empresas marquen el plan de estudios en función de sus intereses.
Y se opone, además, a la modificación de la fórmula de los grados y máster conocida como el “3+2″ sin un análisis previo y una negociación con la comunidad académica y apoya que se elimine la financiación de las universidades públicas.
La propuesta concreta además aspectos del profesorado, entre ellas que los planes de estudios de los docentes incluyan una materia específica sobre igualdad y que se suprima la formación religiosa de las facultades de Educación.
La evaluación profesional tendrá en cuenta la diversidad de los centros, su ubicación y el origen social del alumnado, según el proyecto de IU, pero rechaza un sistema que genere “desconfianza y competitividad”.
También IU quiere una estructura “democrática” de la dirección, no basada en sistemas de gestión empresarial y con autonomía de los centros para administrar sus recursos.
Aparte del plan educativo, IU explica este lunes cómo mejorar la investigación científica y tecnológica con planes estatales y leyes presupuestarias que aseguren esta legislatura unos recursos que lleguen al menos al 0,25 por cien del PIB y un aumento del cincuenta por ciento del personal dedicado a I+D.