«Nuestra fundación pide que se acaben los Te Deum y que se reemplacen por una ceremonia laica e inclusiva», dijeron en un comunicado.
La Fundación Sociedad Atea, solicitó formalmente a las autoridades del país, gobierno, parlamento y líderes políticos terminar con la costumbre de asistir a la Catedral Metropolitana para celebrar la Independencia del país con una ceremonia religiosa es un acto que atenta contra la esencia de un Estado Laico.
«Cuesta entender que Chile, un país que si bien no cuenta con la categoría de Estado Laico en su Constitución pero si tiene un reconocimiento a la “separación Iglesia-estado”, tenga un Te Deum para celebrar la independencia del país, un exceso que no contribuye en nada a avanzar en unir a los chilenos que es lo que debería primar en un día tan republicano como el 18 de septiembre», dijeron en la organización a través de un comunicado.
Chile es uno de los 6 países en el mundo que realiza un Te Deum con motivo de su fiesta nacional. Los otros países son Argentina, Bélgica, Guatemala, Haití y Perú.
«Instalar al Presidente de Chile, en la primera fila de una iglesia para escuchar el sermón de un líder religioso, que como ya es tradición, aportillará todo tipo de avance social que no comulgue con sus particulares “valores”, no es precisamente una muestra de independencia, sino todo lo contrario», afirmaron.
A juicio de la organización «seguimos atados y dependientes del poder religioso tal como en la colonia. Chile se merece un acto conmemorativo laico y republicano, al que se podría invitar a todas las religiones, pero que sea encabezado por el Presidente de la República y no sea solo mero invitado que va a recibir lecciones de moral a un templo»
«Políticos conservadores y creyentes señalan que no sería conveniente que un líder católico tan cuestionado como Ricardo Ezzati encabece ese acto religioso. Mientras en Twitter circula la petición de varios twitteros influyentes para que las personas no asistan a este Te Deum. Otros llaman a funar esta actividad religiosa», añadieron.
«Nuestra fundación va un paso más allá y pide que se acaben los Te Deum y que se reemplacen por una ceremonia laica e inclusiva. Una actividad conmemorativa de nuestra Independencia que cuente con la presencia de representantes de la sociedad civil, organizaciones del tejido social y a dirigentes de base. Además de los clásicos invitados de siempre del establishment político, fuerzas armadas, la élite, líderes religiosos y representantes de los sin credo», aseguraron.
«La figura de Ezzati es el ícono de las malas prácticas de la iglesia y por lo mismo debe dar un paso al costado y renunciar. Pero ese es sólo el primer paso. El tema de fondo es cortar la subyugación política del Presidente de la República con el líder de la Iglesia Católica y para eso, terminar con el Te Deum es fundamental» concluyeron.