COMENTARIO: Hay quien considera que sus procesiones son las únicas que pueden ocupar el espacio público y para atacar cualquier otra iniciativa son capaces de alegar que con la procesión atea convocada en Lavapies se hace "enaltecimiento del terrorismo". Puede resultar increible pero la noticia está aquí.
La Asociación Estatal de Abogados Cristianos (AEAC) ha interpuesto una querella este viernes en los juzgados de plaza de Castilla en Madrid contra los organizadores de la 'procesión atea' convocada por varios colectivos para el Jueves Santo en Madrid porque consideran que "incitan al odio y a la violencia, en concurso con delitos de enaltecimiento del terrorismo".
Concretamente, les acusan de delitos contra el sentimiento religioso y de provocación a la discriminación, al odio y a la violencia por motivos referentes a la religión o creencias y con un delito de enaltecimiento del terrorismo y varios delitos de injurias, calumnias y amenazas.
La denuncia solicita, además, el dictado de medidas cautelares que impidan la celebración de este desfile porque presenta "suficientes indicios de comisión de todos estos delitos tipificados en el Código Penal".
A la vez, la portavoz de AEAC, Polonia Castellanos, ha indicado que la nueva delegada del Gobierno en Madrid, María Dolores Carrión, ha sido notificada de las intenciones de estos grupos, "y podría incurrir en prevaricación si autoriza tal evento".
Autorización
Precisamente la autorización de esta manifestación está siendo polémica, la nueva delegada del Gobierno en Madrid, María Dolores Carrión, había anunciado que su departamento ha trasladado al Ayuntamiento de la capital la potestad para autorización o prohibirla.
El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha afirmado que la decisión de autorizar o no la procesión atea, convocada en Madrid en Semana Santa, corresponde a la Delegación del Gobierno, que, según ha indicado, "aplicará la ley como con cualquier otra manifestación". "Esto lo decide la Delegación del Gobierno de Madrid y se aplicará la ley como en cualquier otra manifestación", ha aseverado el vicepresidente en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Si bien ha reconocido que "no ha estudiado el tema", también ha advertido de que "a todas las manifestaciones se las trata por igual". "La ley es la ley y si toca que sí, será que sí; si toca que no, será que no", ha apostillado.
