Una gran parte de la mezquita Shaan-e-Islam, frecuentada por la comunidad de Surinam, fue dañada por el fuego y en sus paredes aparecieron pintadas frases racistas, dijo un portavoz de la policía de Rotterdam. Nadie resultó herido en el ataque.
Las mezquitas holandesas han sufrido una serie de ataques incendiarios desde que el cineasta Theo van Gogh murió en Amsterdam en noviembre del año pasado.
Un holandés marroquí fue acusado por el homicidio, que aumentó la tensión racial y religiosa en un país que alguna vez fuera sinónimo de tolerancia.
La televisión holandesa mostró imágenes de la mezquita dañada por el incendio en el distrito Viejo Oeste de Rotterdam, con las paredes cubiertas con frases como "Theo Q.E.P.D." (Que en paz descanse), una aparente referencia a Van Gogh, quien enfureció a muchos musulmanes por su opinión sobre el Islam.
El lunes, una corte holandesa sentenció a un hombre a un año de prisión -con seis meses en suspenso- por iniciar un incendio cerca de otra mezquita de Rotterdam en una aparente venganza por la muerte de Van Gogh.