El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, busca crear una versión moderna del Imperio otomano, dijo a Sputnik el director de la Organización para la Democracia y la Libertad en Siria, Ribal Asad.
“Erdogan se posiciona como líder del mundo suní ante el actual reinado chií: quiere restaurar el Imperio otomano (y) la única manera de hacerlo es apropiarse de Siria e ir más allá al sur para dominar Oriente Próximo y África del Norte”, opinó.
De esa manera Ankara podría restablecer el Imperio otomano, del cual Siria formó parte.
Pero Rusia arruinó los planes de Turquía tras instalar en el país bases militares y el sistema antiaéreo S-400, agregó.
El pasado 5 de octubre, Erdogan propuso crear una zona de exclusión aérea y una zona segura en Siria, así como incrementar el aprovisionamiento y entrenamiento del Ejército Libre Sirio, como medida provisional ante el elevado número de sirios que huyen a Europa para solicitar allí asilo.
“Antes de que los rusos llegaran a Siria, Erdogan buscaba un pretexto para usar su Ejército en territorio sirio y para que la zona segura fuera la única vía para él”, indicó Asad.
Desde marzo de 2011, Siria está sumida en una guerra civil en la que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición, algunos extremistas, como el autoproclamado Estado Islámico, o Daesh, y el Frente al Nusra.
Según la ONU, más de 220.000 personas han muerto como consecuencia del conflicto.
Desde septiembre de 2014 una coalición de más de 60 países liderada por EEUU realiza ataques contra los objetivos de Daesh en Siria sin consentimiento de Damasco ni del Consejo de la Seguridad de la ONU.
Desde el 30 de septiembre de 2015 Rusia realiza ataques aéreos contra las posiciones de Daesh en Siria a petición del Gobierno de Bashar Asad.
El llamado Estado Islámico, o Daesh, es una organización terrorista proscrita en Rusia y otros países.
