Tres australianos han acusado a miembros de la Iglesia católica de haber cometido abusos sexuales contra ellos en los años 60, cuando eran monaguillos, en un campamento. El arzobispo de Sydney dimitió hace dos días tras ser denunciado de peder
En 1961, los tres muchachos asistieron junto a un centenar de monaguillos a un campamento en Phillip Island, cerca de Melbourne, donde fueron víctimas de los abusos de un cura y de un seglar, señaló el diario ‘The Sydney Morning Herald’.
Las tres supuestas víctimas tienen intención de presentar sus demandas a los tribunales australianos y han dado a entender que no fueron los únicos en sufrir abusos en aquella excursión.
El arzobispo de Sydney, George Pell, fue acusado también esta semana de haber abusado de un menor, de 12 años, en ese mismo campamento, acusaciones por las que la policía no ha recibido ninguna denuncia pero que han llevado al prelado a dimitir de su cargo.
Pell, quien ha negado todas las acusaciones, ha sido substituido por el arzobispo David Cremin, quien ocupará el cargo mientras dure la investigación que la Iglesia ha abierto para determinar los detalles de las alegaciones.
El pasado mes de junio, la Iglesia católica australiana fue acusada de haber pagado al menos un millón y medio de dólares (1,53 millones de euros) en un intento de comprar el silencio de 126 personas víctimas de abusos sexuales cometidos por 22 de sus miembros en los últimos seis años.
