Antonio María Rouco Varela se ha rendido ante la denominada Iglesia Roja de Entrevías, que en contra de lo que anunció el Arzobispo de Madrid hace ocho meses, podrá seguir llevando a cabo su importante labor evangélica y social.
De la Iglesia Roja de Entrevías, el arzobispo de Madrid afirmó que era "un nido de herejías, que imparten la absolución colectiva y comulgan con rosquillas o turrón, en el colmo de los despropósitos litúrgicos y sacramentales". De este modo, Rouco Varela anunciaba su intención de cerrar esta parroquia, que siempre se ha caracterizado por su lucha contra la exclusión social y la desigualdad.
Desfavorecidos
Sin embargo, el padre de los desfavorecidos, Enrique De Castro, plantó cara a Rouco Varela y aseguró a elplural.com que pese a lo anunciado por el arzobispo, La Iglesia Roja no cerraría sus puertas porque “la gente ha decidido seguir y nosotros con ellos, ahora no se les puede quitar la palabra”.
Presión de la sociedad
Ciertamente, el tiempo le ha dado la razón a De Castro. Rouco Varela no ha aguantado la “presión de la sociedad civil”, y finalmente ha decidido convertir la Parroquia de San Carlos Borromeo en Centro Pastoral, pero manteniendo todas sus atribuciones. Es decir, sus párrocos podrán continuar celebrando todos los sacramentos.
Recapacitar
“No me cabe duda de que el apoyo y la presión de la sociedad civil, les habrá hecho recapacitar", declaró para Europa Press Javier Baeza, uno de los párrocos de la Iglesia Roja de Entrevías.
