Cerca del Palacio Guanabara, sede de la gobernación de Río de Janeiro, hubo violentos disturbios con manifestantes que reclamaron un Estado laico y mayor inversión en servicios sociales.
Un grupo de unas 1.500 personas protestó y se registraron incidentes, mientras el Papa Francisco abandonaba el Palacio Guanabara, en Río de Janeiro. Es la otra cara de la visita del pontífice.
Los incidentes se produjeron durante una manifestación en contra del gobernador carioca, Sergio Cabral, y en demanda de un Estado laico. Según informó la policía, varias personas fueron detenidas, entre ellas dos reporteros del canal Midia Ninja, que trasmite a través de Internet, y varias resultaron heridas. Los demás detenidos fueron conducidos a la comisaría por portar bombas molotov.
La policía afirmó que los tumultos comenzaron cuando los manifestantes comenzaron a arrojar piedras, botellas de agua e incluso una bomba molotov contra los efectivos, quienes a su vez respondieron con bombas de gas lacrimógeno y mangueras de agua.
En tanto, entre los heridos hay un policía que fue alcanzado por una bomba molotov y sufrió heridas de gravedad, un manifestante baleado en una pierna con una bala de goma y un fotógrafo herido en la cabeza.
Por su parte, a través de las redes sociales, los activistas aseguraron que los enfrentamientos entre policías y manifestantes, a unos 200 metros de la sede de la gobernación, fueron originados por efectivos disfrazados infiltrados entre ellos.
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