La portavoz de Educación del PP en Les Corts, Beatriz Gascó, ha acusado al conseller de Educación, Vicent Marzà, de atacar la religión católica e imponer la islámica en las aulas, tras la resolución publicada que determina la imposición de esta enseñanza en siete centros públicos.
El grupo popular va a solicitar a Marzà los informes técnicos para aplicar esta resolución, saber el número de familias solicitantes, si existe demanda real en los centros seleccionados, y si se cumple el convenio que regula la impartición de la religión islámica.
Para el PP, “más que una voluntad social reclamada por las familias parece ser otra imposición de Marzà”, que “recorta injustificadamente el profesorado de religión católica, ataca y pone todo tipo de trabas a los centros concertados religiosos, e impone la enseñanza del islam generando conflictos donde no los había”, indica en un comunicado.
Gascó ha criticado que se ha implantado una medida “polémica” sin consensuar con los municipios ni con la comunidad educativa de cada centro, y ha calificado de “sorprendente” que la resolución se implante en los tres colegios públicos de Almoradí y en dos de Crevillent porque supone “centralizar” a los alumnos, “generar guetos” y un efecto llamada que produce “crispación y rechazo en la población”.
En este sentido, ha afirmado que no se pueden “poner etiquetas o crear guetos” en determinados centros sin que las familias lo supieran, una vez iniciado el curso, y tras haber elegido las familias los centros con unas características determinadas ya que, asegura, “no se puede cambiar el perfil del centro a mitad de curso.
Es paradójico, según la diputada popular, que mientras a los centros les obligan a reservar plazas a los alumnos con compensatoria para que estén distribuidos por la Comunitat, sin embargo, a los alumnos musulmanes se les intente aglutinar en el mismo centro.
Marzà demuestra una vez más que gestiona “a salto de mata y sin ninguna planificación”, ha manifestado Gascó.
