Obispos y Camino Neocatecumenal se manifiestan el 30 de diciembre en Madrid con una misa por la familia cristiana
"En España estamos viviendo una gran mentira cultural, que tiene éxito a través de la manipulación del lenguaje y las ideologías. La sociedad está deshumanizándose. Estamos viviendo una mentira cultural que arrastramos desde hace tiempo, movido por lobbies anticristianos que presionan para cambiar la realidad". El obispo de Alcalá y presidente de la Subcomisión de Familia y Vida de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Reig Plá, trazó este mediodía una siniestra radiografía de los ataques que la vida y la familia sufren en nuestro país, durante la presentación de la Misa de las Familias que este año tendrá lugar en la plaza de Colón el próximo 30 de diciembre, a partir de las 14,30 horas, bajo el lema "¡Gracias a la familia cristiana hemos nacido!".
En su intervención, Reig hizo especial hincapié en el aumento de divorcios y separaciones, el aborto, la falta de cuidados a los mayores e impedidos y la "cultura de la anticoncepción" que, a su juicio, está instalada en España desde hace décadas. "2,5 millones de matrimonios se han roto desde 1981. Eso no es una buena noticia para España. Algo ha pasado en esta sociedad para que haya tantos divorcios y separaciones", recalcó el prelado, quien insistió en que "el divorcio no es progreso, sino un fracaso, aunque todavía estamos afirmando que el divorcio es libertad y progreso". Hablando de la reforma del "divorcio exprés", Reig añadió que "hemos pasado a una situación que rompería el tejido que sustenta la sociedad. Desde entonces, de cada 100 matrimonios se rompen 55, lo que indica que hay una enfermedad social contra la estabilidad y la familia".
"Peligra nuestra civilización", constató el prelado al hablar de aborto y píldoras anticonceptivas, insistiendo en que "en España estamos promoviendo un sistema de contracepción, y una sociedad que destruye la vida naciente es una sociedad enferma". No se trata, recalcó Reig, de "penalizar a la mujer, sino de promover la cultura de la vida", algo que la Iglesia lleva a cabo a través de los centros provida o Redes Madre. "La solución está en nuestras manos".
El obispo también se refirió a la violencia doméstica, cuyas cifras están disminuyendo. "Todo lo que hagamos será poco, pero no podemos hacer bandera para la ideología de género". Reig sí se mostró esperanzado ante el ejemplo dado por los jóvenes de la JMJ, "hay una juventud distinta". Pese a ello, denunció cómo el 95% de los padres descubren a sus hijos viendo pornografía en internet. "Son situaciones que reflejan una enfermedad y una decadencia en nuestra sociedad".
Frente a esta realidad, el obispo reclamó a los fieles "manifestar públicamente que hay otra forma de vivir. Hacer de la familia la respuesta". De ahí la nueva convocatoria del próximo 30 de diciembre, que por la crisis será más austera que en otras ocasiones -el año pasado costó medio millón de euros, bastante menos que en esta ocasión, como recalcó la secretaria general de la Provincia Eclesiástica de Madrid, María Rosa de la Cierva, aunque no dio cifras-.
Cuestionado sobre si el advenimiento del nuevo Gobierno del Partido Popular dará más oportunidades a la Iglesia de plantear su modelo de sociedad y de familia, Reig Plá insistió en que "la familia, sin ideologías. Para nosotros es indiferente quién nos vaya a gobernar. No dependemos de eso. Más allá de cada Gobierno, la Iglesia continuará perseverando por el bien de la vida y de la familia". Y más en una situación como la que vivimos, pues "España es el país de la UE que menos ayuda a la familia". De ahí que Reig reclamara un mayor asociacionismo familiar. "Pedimos a los laicos que alcen su voz para que no se puedan ejercer políticas sin contar con las familias cristianas".
"En España sobra estatalismo, lo hemos sido pertinazmente. Este individualismo atroz hace imposible construir sociedad", denunció el prelado, quien recordó que "las grandes decisiones corresponden a la sociedad, y las minimas al Estado". Pese a todo, recordó que "estos actos no son contra nadie, no tienen una ideología política detrás".
En todo caso, para el responsable episcopal, "estamos viviendo una gran mentira cultural, que hunde sus raíces en mayo del 68, y que está ejerciendo una influencia masiva y manipuladora". El aborto, el divorcio, la violencia de género, el abandono de nuestros mayores… son prueba de ello, en opinión de Reig, y una de las razones por las que la convocatoria de la Misa de las Familias "sigue siendo necesaria". En la misma, como en anteriores ocasiones, participarán buena parte de los obispos españoles, y decenas de prelados europeos, con un gran protagonismo del Camino Neocatecumenal, y la participación via satélite de Benedicto XVI.
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