Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

Obispo castrense de Argentina propone beneficiar con prisión domiciliaria a represores

El nuevo obispo castrense designado por el papa Francisco se mostró de acuerdo con otorgar este beneficio a mayores de 70 años condenados por delitos de lesa humanidad.

Hace diez años que no había un obispo castrense designado en la Argentina. El último había sido Antonio Juan Beseotto, quien renunció a su cargo por haber alcanzado a los 75 años el límite de edad permitido por el derecho canónico. Dicho obispo, había estado envuelto en un escándalo al declararse en contra del aborto y decir que “quienes escandalizan a los niños” merecen “ser arrojados al mar con una piedra de molino atada a su cuello”.

Una década después el papa Francisco designa al monseñor Santiago Olivera a ocupar la vacante y que, en diálogo con la agencia de noticias Telam, no tardó en mostrar también su visión con respecto a la última dictadura militar.

Su opinión a favor de beneficiar con el derecho a prisión domiciliaria a los mayores de 70 años condenados por delitos de lesa humanidad esta enmarcado en un plan más de conjunto que es la reconciliación con las fuerzas armadas.

En esa sintonía, declaró que “es importante el servicio de acompañar a las Fuerzas Armadas y de seguridad para hacer un camino de mirar para adelante. Con justicia sí, pero también cerrando heridas, historias y reconociendo errores” y agregó que “la voluntad de querer mirar para adelante y sanar heridas reconociendo esos errores tiene que venir de todos lados”.

A tono con el discurso del gobierno de instaurar como predominante la teoría de los dos demonios, declaró que “lo hemos vivido el 24 de marzo, cómo en algunas personas había una memoria un poco parcializada, un poco volcada hacia un lado”. “Por eso digo que la reconciliación debe ser para todos lados. Nos damos cuenta de que todavía hay mucha herida abierta en el país, y si no hay verdad y no hay reconocimiento de culpas tampoco hay justicia ni paz. Es todo un camino de ayudar a buscar eso el que hay que recorrer”, concluyó el nuevo obispo.

En relación a la prisión domiciliaria para represores, argumentó que “no es una puerta cerrada. Si una persona mayor de las fuerzas armadas tiene el mismo derecho que otra en su condición, ¿por qué no dárselo? Por más que se haya equivocado gravemente tiene ese derecho. Aunque tampoco fueron todos. algunos no se han equivocado gravemente”.

Agregó además de que “los derechos humanos hay que vivirlos para todos. Que la Justicia cumpla su labor, que tiene que ser en todos los tiempos y para todas las personas. No una justicia selectiva, solo para algunos, y más mala para otros. La Justicia no puede ser ni mala ni buena, tiene que ser Justicia”.

Por último, anunció que asumirá “los primeros días de junio. Estamos coordinando con distintas personas que tienen que estar, de la Iglesia y del Gobierno porque es un momento casi histórico este nuevo inicio”

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share