Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

Marruecos lanza una ofensiva contra el extremismo islamista

El rey anuncia una reforma religiosa tras la clausura de 30 escuelas coránicas Una fatua que avalaba el matrimonio de niñas a partir de 9 años fue el detonante

Para algunos, fue solo un pretexto; para otros, la gota que colmó el vaso. La fatua (edicto religioso) lanzada a principios de septiembre por el ulema (sabio del islam) Mohamed al Magraui avalando el matrimonio con niñas de nueve años porque "ofrecen mejores prestaciones sexuales que las de 20" ha desatado una respuesta firme de las autoridades al peso creciente del integrismo islámico en la sociedad marroquí. En menos de una semana se procedió al cierre de 30 madrasas (escuelas coránicas) que, según fuentes religiosas consultadas por EL PERIÓDICO mantenían vínculos ideológicos y espirituales con Magraui. El siguiente paso fue el anuncio del rey Mohamed VI, que es también la máxima autoridad religiosa del país, de una nueva y profunda reforma.
El primer cerrojazo lo dieron el pasado 28 de septiembre a la escuela del propio Magraui en Marraquech. Su letrero, Por el aprendizaje del Corán y la Sunna, ha quedado en el suelo. "Fue un asalto y destrozaron parte de la madrasa", afirma Zacarías, uno de sus discípulos, convencido de que lo que está pasando se debe a una "manipulación" de las palabras de su líder.

UN ISLAM TOLERANTE
El objetivo de la reforma religiosa anunciada por Mohamed VI, el comendador de los creyentes, es acotar el poder de los integristas. Para ello se descentralizarán los consejos de ulemas, y los consejos locales ayudarán a "fortalecer la seguridad espiritual" y a "preservar la doctrina de un islam suní y tolerante", según afirmó el monarca. Reduan Benchekrun, miembro del Consejo Superior de los Ulemas, asegura que esta reforma "facilitará el control de los discursos de los imanes y las actividades en las mezquitas. Es una forma de evitar el peligro islamista". Este esfuerzo se extenderá también a los más de tres millones de marroquís que viven fuera de su país, que contarán con su propio consejo de ulemas.
Muy escépticos de muestran Ibrahim y Adelatif, que aguardan indignados ante las puertas de la principal escuela coránica de la ciudad de Salé, a sólo dos kilómetros de Rabat. Han cerrado su madrasa y otras cuatro en el mismo Salé. Hasta 3.000 personas acudían a diario para "aprender los versículos del Corán".
Ibrahim asegura defender un "islam tolerante". Los fieles, antes de que echaran el candado a la madrasa, leían el Corán de ocho y media de la mañana a doce. Por la tarde, conferencias y charlas sobre la palabra de Alá y del profeta. "Ahora, muchos musulmanes vagabundean por las calles y no saben qué hacer", puntualiza.

BARBUDOS
Dice su colega Abdelatif, poniendo una nota de color al asunto: "Tenemos barba larga y llevamos jobador (traje tradicional similar a la chilaba), pero no somos fundamentalistas". ¿Cómo se define usted? "Musulmán suní", responde. "Somos abiertos dentro de la limitación religiosa", agrega. "No tenemos nada que ver con Magraui y luchamos contra el extremismo", insiste Ibrahim. Aún así, no les faltaron palabras de apoyo al líder religioso.
Para el ministro de Finanzas, Salahedín Mezuar, estas actitudes reflejan que "el radicalismo aún existe en Marruecos, y contra ello hay que luchar". Los líderes extremistas como Magraui "no quieren que este país avance" y por eso "nosotros, como fuerza de modernidad y de progreso, debemos trabajar más", sentencia. La fiscalía tardó, pero abrió una investigación a Magraui. Según el ministro, "la justicia seguirá su camino". Y la reforma, la segunda en el reinado de Mohamed VI –la primera fue en el 2004, tras los atentados de Casablanca–, tratará de preservar la identidad del islam marroquí frente al auge de las ideas salafistas procedentes de Oriente, propagadas por imanes radicales y antenas parabólicas y que han hundido sus raíces en la pobreza y la falta de futuro en las que viven amplias capas de la población.

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share