Los agentes son cofrades de honor de la Hermandad desde los años cincuenta
«Los policías nos vemos obligados durante nuestro trabajo diario a tratar con diversidad de personas y, en especial, con las víctimas y su dolor», ha explicado el jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía, Jesús García Ramos, durante su alocución ante agentes, feligreses y penitentes de la Cofradía de la Piedad al inicio del oficio religioso en su honor celebrado este jueves en la iglesia de San Martín con motivo del tercer día del quinario de la Virgen de la Piedad. El alto mando ha destacado que es entonces, cuando se topan con el sufrimiento de «las personas más débiles», cuando los policías deben «aportar amor fraterno, tolerancia y humanidad».
Y es en ese punto cuando los agentes, cofrades de honor de la hermandad de la Piedad desde los años cincuenta, toman ejemplo «del sentimiento cristiano de amor y esperanza que muestra la virgen» ante su hijo en la imagen de La Quinta Angustia de Gregorio Fernández, de la que es titular la cofradía de la Piedad y que durante estos días preside el altar de San Martín.
Una veintena de policías nacionales, incluidos los integrantes de la escolta de honor que cada Jueves Santo acompaña a la talla en la procesión de Penitencia y Caridad, ocuparon los primeros bancos de la iglesia con sus trajes de gala para «venerar y honrar a la virgen», pedirle «un año más su protección» y recordar a los policías fallecidos.
La «reflexión de fe» sobre el amor cristiano realizada por el jefe superior –acompañado por el subdelegado José Antonio Martínez Bermejo y el comisario José Ángel González– dio paso al oficio religioso, en el que los cofrades agradecieron también a los agentes su «desvelo por todos nosotros» y su «trabajo por nuestra seguridad para que todos podamos estar tranquilos».
La ceremonia de ayer cerró el tercer día de un quinario que tendrá su punto álgido este sábado con un besapié y la imposición de medallas al medio centenar de cofrades que este año pasan a formar parte de la Hermandad de Nuestra Señora de La Piedad –el acto tendrá lugar a las 20:00 horas–, según anticipa el presidente de su junta gestora, Francisco Javier Cartón, quien confirma la «buena sintonía existente» entre la propia cofradía y la parroquia, a la que volvió la imagen de Gregorio Fernández en diciembre del pasado año por orden del Vaticano después de ocho años en el convento de las Descalzas Reales.
Tanto es así que la cofradía celebrará a partir del martes un triduo –cada día a partir de las 20:00 horas– de nuevo en San Martín en honor a su segunda imagen, el Cristo de la Luz Amarga –obra también de Gregorio Fernández, por «primera vez en nuestra historia», anuncia.
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