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Los obispos quieren dar servicio pastoral a menores infractores

Dan un toque de atención a la Junta porque Andalucía es una de las comunidades que no tiene firmado un acuerdo con la Iglesia y quieren iniciar los contactos

Los obispos andaluces dieron ayer un toque de atención a la Junta al ser Andalucía, una de las comunidades que no tienen firmado un acuerdo para que la Iglesia preste "servicio pastoral" a los mejores infractores internados por la comisión de delitos. Ésta es una de las principales conclusiones de la CVXII Asamblea Ordinaria de los Obispos del Sur de España (Odisur) -reúne a los titulares de las diócesis de Sevilla, Granada, Almería, Cádiz y Ceuta, Córdoba, Guadix-Baza, Huelva, Jaén, Jerez y Málaga- celebradas desde el lunes y el martes en Córdoba, en la que manifestaron su preocupación por esta situación, máxime cuando hay antecedentes, como el acuerdo vigente entre la Santa y Sede y el Estado español", y por la experiencia en otras comunidades autónomas, y consideraron necesario iniciar las gestiones para desarrollar un servicio pastoral de "gran utilidad educativa y social" en momentos señalados de la evolución y reeducación de dichos jóvenes.

La coordinación de esta iniciativa corresponde al Departamento de Pastoral Penitenciaria de la Conferencia Episcopal España -trabaja con cada diócesis y su correspondiente delegación pastoral hasta el último eslabón que es la capillanía penitenciaria-, responsable desde los años 70 de la atención religiosa, social y jurídica a los adultos en las prisiones en los ámbitos de la educación, mejora de la estancia en la cárcel y reinserción, y que también abarca a los menores que están privados de libertad.

En este encuentro anual de Odisur también fue sometido a examen la situación de la asignatura de Religión en las Facultades de Ciencias de la Educación y en los centros de la Iglesia adscritos a la Universidad, facilitando también un informe estadístico sobre la matriculación de los alumnos en la clase de Religión en los centros de enseñanza de Educación Primaria y Secundaria, y sobre la situación actual del profesorado de Religión en dichos centros. A juicio de los obispos andaluces, tienen que "impulsar la comunión eclesial y coordinación de los diferentes sectores implicados en el campo de la educación católica constituye una necesidad prioritaria para responder de la mejor manera posible a las urgencias que plantea hoy la educación católica en Andalucía", donde en la actualidad hay 400 centros católicos, integrados por más de 16.000 profesionales y más de 260.000 alumnos.

De igual modo, los obispos han proseguido con el estudio iniciado en la reunión anterior sobre la pastoral de la iniciación cristiana en sus respectivas diócesis, centrado en el ámbito de la familia, de la parroquia y de la escuela católica. En este sector de la vida de la Iglesia, según este colectivo, "se constata la riqueza y la variedad de iniciativas tendentes a la renovación y el progreso de la educación en la fe de los niños y jóvenes, a través del proceso de la iniciación cristiana que integra la unidad y la mutua relación entre los sacramentos del Bautismo, de la Confirmación y de la Eucaristía".

Los obispos han encomendado al obispo de Almería y delegado para la Catequesis, Adolfo González Montes, la preparación de un "instrumento de reflexión y estudio sobre la iniciación cristiana" con destino a sacerdotes, padres, catequistas y educadores.

En el apartado de salud, el obispo de Jerez, José Mazuelos, ofreció sus consideraciones sobre la necesidad de la Pastoral de la Salud, con el reconocimiento a la labor desarrollada por los capellanes en los hospitales, centros de gran significación evangélica y donde "favorecen la humanización de la enfermedad, satisfacen el legítimo derecho de los enfermos y familiares y ofrece los dones de la fe cristiana a las personas aquejadas por la enfermedad". Por ello, los obispos alentaron las iniciativas que los capellanes desarrollan, "para su mejor formación en la pastoral hospitalaria", y agradecieron su entrega.

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