“La Iglesia trabaja con su propio calendario, que no está marcado por ningún otro, y mucho menos por los calendarios de los políticos”, reiteró Martínez Camino para desmentir que la beatificación de religiosos fallecidos durante la guerra civil tenga algo que ver con la oposición de la Iglesia a la Ley de Memoria Histórica, que se aprobará previsiblemente en las mismas fechas.
Fechas distintas
El portavoz de la Conferencia Episcopal aseguró que la Iglesia trabaja “despacio” y que las 23 causas que engloban estas beatificaciones se iniciaron en fechas distintas (17 de ellas durante la dictadura, y el resto ya en democracia), la documentación se envió a Roma en 1997 y el Papa firmó los últimos reconocimientos de estas personas como “hijos heroicos” de la Iglesia hace dos meses.
"Marco amplio de tiempo"
Martínez Camino apuntó que “la fecha la ha elegido la Santa Sede” dentro de un “marco amplio de tiempo”, y reiteró que la ceremonia busca el reconocimiento de los católicos “que han amado a Jesucristo por encima de su propia vida pudiendo haberla salvado” y que fueron martirizados en momentos de “quebrantamiento salvaje de los derechos humanos o de la paz”.
¿Mártires del bando republicano?
Aunque trató de separar toda connotación política de la ceremonia, que insistió en definir como un acto “cristiano de reconciliación y de paz” y que “no busca culpables del martirio, ni discutir cuestiones históricas o políticas”, Martínez Camino no dio ninguna explicación clara de por qué no hay ninguna beatificación del bando republicano.
Al ser preguntado por los sacerdotes vascos represaliados por el bando nacional, el portavoz apuntó que “no hay ningún prejuicio previo que cierre el camino a nadie” y que si esas personas murieron por defender su fe, podría iniciarse el proceso.
"No se buscan culpables"
Según el portavoz episcopal, las beatificaciones “no van contra nadie, no se buscan culpables, no se busca discutir cuestiones históricas o políticas. “La ceremonia y la fiesta serán grandes, porque grande es la página de la historia de la Iglesia en España que en ella se refleja”, precisó.
Asistencia
74 obispos de todas las diócesis españolas han confirmado ya su asistencia a la plaza de San Pedro del Vaticano el próximo 28 de octubre a la que será la beatificación más numerosa de la historia de la Iglesia. Se calcula que además asistirá unos 20.000 fieles españoles. Sobre la representación del Gobierno, el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, confirmó ayer que sí habrá algún miembro del Ejecutivo en los actos, aunque no precisó quién.
