Los benedictinos, “obstáculo para que el Gobierno no haga un Museo de los Horrores del Franquismo”
A través de un correo electrónico, y haciendo uso de varias páginas web de extrema derecha, la orden benedictina que se hace cargo del Valle de los Caídos ha solicitado ayuda económica para asumir “unas obras que Patrimonio no asume”.
En concreto, los monjes necesitan entre 100.000 y 150.000 euros para acometer una serie de obras de mejora y acondicionamiento en el noviciado que Patrimonio no habría considerado imprescindibles en estos tiempos de crisis económica.
“Lugar tan querido”
“Recuerda que la Comunidad Benedictina es el único obstáculo para que el Gobierno no transforme el Valle de los Caídos en un Museo de los Horrores del Franquismo. Mientras la Abadía se mantenga, con su presencia y oración, habrá esperanza de que no se profane este lugar tan querido para muchos de nosotros”, se afirma en el correo electrónico.
Silencio
Desde la Abadía del Valle de los Caídos aseguran que ese correo electrónico no ha sido redactado por ningún monje y se niegan a confirmar si necesitan o no esa cuantía de dinero para realizar unas obras de mantenimiento en el monumento que Franco construyó con la sangre de los vencidos para rendir gloria a los vencedores de la Guerra Civil.
Memoria Histórica
Sea como sea, lo que está claro es que la ley de Memoria Histórica fija la despolitización del Valle, convirtiéndolo exclusivamente en lugar de culto religioso. Cosa que los monjes benedictinos todavía no han logrado o querido hacer.
Las perlas del Abad
Como prueba, basta con contemplar las declaraciones que el Abad del Valle de los Caídos realizó recientemente a una televisión sueca, o el concepto que tiene sobre lo católico y lo español.
