Los ateos han decidido poner a prueba a Cristina Cifuentes. Este colectivo, que desistió de manifestarse el Jueves Santo después de que la delegada del Gobierno en la capital prohibiese esta cita argumentando que la solicitud había llegado fuera de tiempo, ha convocado una protesta para el 26 de abril a favor de la escuela laica y de la libertad de expresión y manifestación.
La marcha, convocada por la Asociación de Ateos y Librepensadores de Madrid (AMAL), se desarrollará a partir de las 20 horas entre Tirso de Molina y la Plaza de Lavapiés. Un acto con el que el colectivo quiere denunciar que la implantación de la educación privada y concertada en Madrid se ha hecho a costa de “una clara segregación del alumnado”, al derivarse casi todos los estudiantes con necesidades educativas específicas hacia la escuela pública sin aportar los recursos necesarios para atender adecuadamente esta situación.
Asimismo, con esta protesta AMAL también quiere reivindicar “voz propia” para los ateos y librepensadores de Madrid para protestar a favor de una escuela laica, y evitar así que sus hijos “sigan adoctrinados”. Una propuesta que llega días después de que el colectivo desistiese de celebrar la marcha convocada para el Jueves Santo, ante la negativa del departamento de Cifuentes a autorizarla tras asegurar que la notificación había llegado fuera de plazo.
No obstante, la de hace un par de semanas no era la primera protesta de los ateos a la que se había opuesto Cristina Cifuentes. En 2011 y 2012 AMAL, junto con otras asociaciones vecinales y anarquistas, pidió manifestarse también el Jueves Santo. En aquel momento, la Delegación del Gobierno prohibió las marchas “por su evidente afán de provocación de los católicos”, aunque autorizó otras manifestaciones convocadas en fechas posteriores a la Semana Santa.
Caso que se repite ahora, cuando la delegada ya no puede escudarse en cuestiones religiosas para justificar sus decisiones. Algo que desde el colectivo se han apresurado a señalar, al igual que también se ha recordado que la propia Cifuentes, hace ahora un año, presentó una enmienda a los estatutos del PP para que se cambiase el concepto de partido “inspirado en los valores del humanismo cristiano” por “humanismo occidental o europeo”. Una propuesta que fue rechazada por los populares.
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