Entre las medidas propuestas están "dar cabida a la sociedad civil en todos los ámbitos de desarrollo del proyecto de la Alianza de Civilizaciones" e "impulsar y apoyar la creación de una Asamblea Global de las Culturas". Además, reclama a los países que han asumido la alianza que tengan "coherencia en lo relativo a la libertad religiosa, respeto a las minorías y políticas migratorias justas".
También solicita que se incentive el diálogo interreligioso y que se fomente "productos bancarios y financieros de contenido halal", es decir, que sigan los preceptos del Corán y que "tiendan a la humanización de la economía y la redistribución de la riqueza".
También propone que se respalden las políticas que busquen la "igualdad de género" y que se fomente el desarrollo de Internet en los países en desarrollo.
Por último, el Liderazgo Islámico Mundial se hace eco de una vieja reivindicación de los musulmanes españoles: que se recupere "la memoria histórica andalusí como paradigma de la Alianza de Civilizaciones" con medidas concretas como la "concesión preferente de la nacionalidad española a los descendientes de los andalusíes".
El decálogo se le hará llegar a José Luis Rodríguez Zapatero, presidente de España y principal impulsor de la Alianza de Civilizaciones.