Miles de personas marcharon este domingo en Beirut para exigir un Estado laico en el Líbano, un país regido por un sistema político confesional. El derecho a un casamiento civil fue una de las principales reivindicaciones de un acto organizado a través de las redes sociales.
Al grito de “¡Laicidad!”, varios miles de personas marcharon este domingo por las calles de Beirut con carteles donde podía leerse “Sí al matrimonio civil, no a la guerra civil” o “Fátima y Tony se aman… y eso es un problema”.
La “Laique Pride”, como la llamaron sus organizadores, apuntó a reclamar el verdadero respeto de la libertad de opinión y culto, tal como prevé la Constitución de Líbano.
Sin embargo, en este país que reconoce oficialmente 18 comunidades religiosas, la religión domina la esfera pública. Por ejemplo, la organización política prevé que el presidente sea cristiano maronita, el presidente del Parlamento, musulmán chiíta y el primer ministro, musulmán sunita.
Una de las principales reivindicaciones de los manifestantes fue la del matrimonio laico, ya que en este país sólo existe el religioso, por lo que muchas parejas viajan hasta Chipre para firmar un casamiento civil.
Entre los manifestantes también se hallaban defensores de los derechos de las minorías sexuales, que desfilaban con banderas con los colores del arco iris y eslóganes que rezaban: “homosexuales por la laicidad”.
“Actualmente no hay motivos para ser optimistas, pero yo tengo 30 años… Es un tema tabú, pero tenemos que comenzar a romper ese tabú, los esquemas del miedo al otro, el de las religiones también”, dijo a RFI Nasri Sayeg, uno de los organizadores de la marcha”.
“Insisto en que todo se hace respetando todas las religiones. No es en absoluto antirreligioso o algo así. Hay mujeres que llevan el velo, por ejemplo, todo el mundo está aquí, de todas las generaciones”, añadió Sayeg, cuya organización convocó a la marcha a través de las redes sociales Facebook y Twitter.
