Con motivo del 25 aniversario del Seminario Castrense, el arzobispo emérito castrense y cardenal José Manuel Estepa (impulsor del seminario) presidió los actos conmemorativos junto con el actual obispo castrense, Monseñor Juan del Rio.
En el Colegio Sacerdotal Castrense Juan Pablo II, erigido en 1991, se forman los candidatos al sacerdocio castrense. Su misión es promover y cuidar las vocaciones sacerdotales así como formar a los seminaristas que se preparan para el sacerdocio con una vocación específica en orden al ministerio pastoral castrense.
“La labor de los capellanes castrenses continúa estando muy viva. En todas las zonas de operaciones especiales se desplaza siempre un ‘pater’, quien además de prestar servicios pastorales a los militares que así lo solicitan, también les acompaña en labores humanitarias”, declaran a Religión Confidencial fuentes del arzobispado castrense de Madrid.
A cada misión, un ‘capellán’
Las mismas fuentes aseguran que un buen número de militares solicitan el sacramento de la confirmación cada año en estas misiones internacionales, en las que han participado ya 77 capellanes y de ellos, más de la mitad han asistido a varias.
Actualmente, hay capellanes desplazados en Bosnia-Herzegovina, Afganistán, Kosovo, e Irak, además de los que se encuentran navegando en aguas internacionales. Cada misión, de duración indeterminada, se constituyen “agrupaciones militares”, acompañados por un capellán que suele relevarse cada seis meses.
La presencia de capellanes en las misiones de paz o de ayuda humanitaria que vienen realizando en los últimos años los ejércitos españoles fuera del territorio nacional, en zonas de conflictos o de catástrofes naturales, es muy demandada. Su acción ministerial es especialmente necesaria, según informa el arzobispado castrense.
Acuerdos con la Santa Sede
En virtud de los acuerdos vigentes entre el Estado español y la Santa Sede sobre “Asistencia Religiosa a las Fuerzas Armadas y Servicio Militar de Clérigos y Religiosos”, el sueldo de estos capellanes es costeado por el Estado.
Por el momento, no está contemplado que esta normativa sea modificada, y si así fuera, “el arzobispado castrense no se posiciona sobre esta cuestión, está por encima de nuestras funciones”, explican las mismas fuentes.
Sin embargo, aclaran que al igual que este acuerdo permite ofrecer un servicio católico a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el resto de confesiones también tienen el mismo derecho de procurar representantes de otras religiones para acompañar a militares, policías o guardias civiles.
En estos momentos, en España hay un total de 110 capellanes castrenses. La misión del Arzobispado Castrense es ofrecer asistencia religiosa pastoral a sus miembros.
El Capellán que asiste a estas misiones internacionales acompaña a los militares en la misión, comparte con ellos el riesgo, los trabajos y las dificultades, realiza entre ellos su ministerio pastoral como sacerdote, los conforta espiritualmente, realiza funciones de asistencia social y humana.
