Las fechas, el tema, el planteamiento espacial, todo podría llevar a pensar que En el monte del olvido, espectáculo escrito y dirigido por Alfonso Zurro, es una incursión teatral canónica en un pasaje bíblico, que también. Pero no hay que sacar conclusiones erróneas. Tampoco los que conozcan a ese salmantino agitador del teatro andaluz que es Zurro, al que es fácil ver como un iconoclasta, irreverente y, si hace falta, desvergonzado.
El espectáculo, en el teatro Español, recrea el encuentro de los dos ladrones (Alex Peña y Nacho Bravo) crucificados junto a Jesús. Ya en sus cruces, soldados y mirones han ido a buscar al auténtico protagonista. Están solos, a pesar de la esporádica presencia de una palestina (Eloína Marcos) y saben de su insignificancia ante el que está por llegar. Uno es un incrédulo, el otro, con alguna esperanza en su futuro…
Una laicista e inteligente revisión y recreación de un suceso bíblico utilizado por Zurro, quien no renuncia al humor para hacer una reflexión nada irreverente sobre la fe y la esperanza, con unos actores sobresalientes.