Este verano, Cubo de Bureba tiene dos buenas noticias. Por un lado, el esperado inicio de la reforma proyectada en la iglesia tras dos años de largas gestiones y, por otro, la nueva traída de agua que ha resuelto totalmente los problemas de abastecimiento de la población. El alcalde, Roberto Cabezón, anuncia que las obras en el templo arrancarán mañana jueves coincidiendo con la inauguración de las fiestas patronales. El presupuesto de la rehabilitación asciende a 173.000 euros y para financiarla se cuenta con aportaciones vecinales por encima de los 40.000 euros, es decir, casi el 25% del dinero saldrá del bolsillo de los vecinos. Además, el Ayuntamiento ha pedido un préstamo de 50.000 euros a la Caja de Cooperación de la Diputación y cuenta con 28.000 euros procedentes del ‘convenio de las goteras’ firmado por la Diputación y el Arzobispado.
La campaña para pedir dinero a vecinos y veraneantes para el arreglo de la iglesia comenzó en agosto de 2011 con la intención inicial de reponer la torre y la veleta, estructuras ambas que quedaron muy dañadas tras un fuerte vendaval ocurrido a principios de 2009. Más adelante, se vio que también era necesario intervenir en el tejado. Finalmente y tras dos largos años de gestiones, la obra comenzará a ejecutarse. Queda pendiente buscar nuevas vías de ingreso para poder costear el proyecto al completo. El proceso de rehabilitación de la iglesia ha sido «más complicado» de lo que se esperaba allá por 2011 cuando se empezó a pedir dinero a los vecinos, según indica el alcalde.
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