El Gobierno volvió a cuestionar el fin de semana a la Iglesia Católica a través del viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas. Ayer, el presidente de la Cámara de Diputados, Héctor Arce (MAS) lamentó la “actitud política” de los clérigos en el nuevo Estado laico. Por su parte, el diputado de Convergencia Nacional, Andrés Ortega, dijo que la Iglesia es una entidad más grande y perdurable que los gobiernos en el mundo y recordó al Ejecutivo que el Papa no es “presidente de los católicos”, por lo tanto no es electo por normas democráticas convencionales.
El diputado de oposición se refirió a las declaraciones efectuadas por el viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas, en los medios de comunicación estatales, donde calificó a los clérigos como interesados en desestabilizar el proceso de cambio. Esas palabras fueron una réplica de los ataques lanzados por el mandatario Evo Morales la anterior semana.
“La Iglesia es más grande que los gobiernos y cuando termine el gobierno de Evo Morales va a seguir existiendo la Iglesia Católica. No sé cuál es la intención revanchista del Ejecutivo, si bien todos podemos cometer errores, la Iglesia Católica tiene un valor más grande que el Gobierno que es la fe, salvo que quieran manejar la fe para que los bolivianos debamos creer en Evo Morales y no preocuparnos de la falta de gestión”, dijo.
Según Ortega, el Gobierno actual no recuerda el período cuando la Iglesia fue mediadora de los conflictos provocados por sectores sociales, entre ellos los cocaleros dirigidos por Evo Morales, donde se abogó por el respeto a los derechos de protesta y el diálogo entre las partes.
“Recuerdo que los más grandes defensores de Evo Morales fueron en su momento los sacerdotes de la Iglesia Católica que hicieron respetar sus derechos humanos y políticos y es un mal pago el que ahora hace el Gobierno”, manifestó.
TIPO DE DEMOCRACIA
El viernes pasado, el presidente del Estado Evo Morales, cuestionó en presencia del Nuncio apostólico del Papa Benedicto XVI, el “tipo de democracia” del Vaticano y la “elección” del sumo pontífice. Dijo que esa elección se hace a “puertas cerradas” porque los católicos sólo nos enteramos a través de señales de humo blanco o de humo negro. “Seguramente quieren esa clase de democracia”; afirmó el Jefe de Estado.
Al respecto, el diputado Andrés Ortega explicó que “el Papa no es el presidente de los católicos, no es electo por votos, tienen su estructura y no hay punto de comparación. Ahora podemos cuestionar el caso de las FFAA que tienen a su Comandante que nadie lo ha elegido y que se nombra antiimperialista; entonces qué clase de democracia es esa, o debemos pensar también en votar por los comandantes de Ejército”.
LAMENTA ANÁLISIS POLÍTICO
El presidente de la Cámara de Diputados, Héctor Arce, se sumó a la postura oficialista en torno a la Iglesia Católica lamentando las reflexiones y análisis “equivocados” que fueron expresados durante el congreso de la Conferencia Episcopal Boliviana sobre la realidad nacional, aludiendo responsabilidad al Gobierno por la falta de comunicación con sectores de la sociedad, situación que repercute en la democracia, la subida de precios y el crecimiento del narcotráfico.
“La Iglesia Católica no hace una lectura correcta de lo que está pasando en el país, lamento que hablen de democracia cuando en Bolivia los bolivianos después de varios años ahora sabemos como utilizar y desarrollar la democracia. Lamento que la Iglesia no entienda que la democracia incorpora ahora mecanismos que en el pasado no existían y que jamás habrían existido. Lamento que nuestra Iglesia, porque soy católico, no entienda que hay situaciones que hay que dejar para el Gobierno de los hombres y dejar esta lógica de tener opinión política y análisis políticos equivocados que contravienen una decisión que ha adoptado el país como un estado laico”, declaró.
Según el Viceministro de Descolonización, “el documento de la Iglesia habla sobre la subida de precios de algunos productos, del narcotráfico y de la democracia, pero no dice y no explica por qué subió el precio del azúcar; a la Iglesia no le interesa el alza de precios, le interesa desestabilizar el proceso de cambio (…) en una lógica de la UDP de desestabilizar el proceso de cambio a través de una escalada de precios”.
