En estos días, nos comunican que la Asociación Laica de Rivas (ALRV) inicia su campaña, la de todos los años desde su creación, contra la financiación abusiva de la Iglesia Católica (IC) a costa de los impuestos de todos, los católicos y los no católicos. La IC recibe cada año del erario público la escandalosa cantidad de 11.000 millones de euros por exención de impuestos y por asignación directa (247 millones por IRPF y a través de las asignaciones a fundaciones y ONG,s de ideario católico 120 millones). La ALRV recomienda que no pongamos ninguna cruz en las casillas de la Declaración de la Renta correspondientes a la IC, ni tampoco en la de Fines Sociales, en todo caso que se ponga en la de ‘sin asignación’. Esto, desde el principio de que la recaudación impositiva debe ser administrada en su totalidad por el gobierno de la nación y las cámaras de diputados y senadores, y no discrecionalmente desde las creencias de cada uno. Sobre todo porque los que le adjudican el 0,7% a la IC o a Fines Sociales, están tributando ese mismo porcentaje menos que los demás contribuyentes: es como si cada uno pudiera detraer de sus impuestos un 0,7% para adjudicárselo a su asociación, equipo de futbol, etc.
Pero no solo se aprovecha la IC de este beneficio (recogido en el Concordato Iglesia-Estado): los edificios religiosos no pagan IBI, ni licencias por obras, ni ningún otro impuesto; los profesores de religión cobran del estado; y los obispos pueden actuar como registradores y apropiarse de todos aquellos bienes inmuebles no registrados (son las inmatriculaciones)… Estas entre otras prebendas.
Pero son muchas las voces que ya claman contra estos abusos de la IC, consentidos por los poderes públicos. Incluso ya hay gestores políticos de algunas localidades, que les reclaman el IBI de los edificios religiosos, se oponen a las inmatriculaciones, etc.
En nuestra ciudad Rivas Vaciamadrid, la ALRV lleva trabajando en buena armonía con los sucesivos gobiernos locales, desde su creación, siempre con buenos resultados: la recuperación del cementerio como recinto municipal y no solo católico (como rezaba en la placa de la entrada); la iniciativa del Acogimiento Civil a los recién nacidos; la creación de la oficina de Asesoramiento sobre Derechos Civiles; la de Asesoramiento para una Muerte Digna; la moción aprobada por el Pleno Municipal en contra de la financiación de las iglesias desde las arcas públicas; la consideración del ‘rito de paso’ de los jóvenes que acceden a su mayoría de edad ‘La Nueva Ciudadanía’; la inclusión en los programas electorales de algún partido de izquierda de las propuestas de la ALRV; etc.
Pero hay algunas solicitudes que la ALRV ha cursado a los sucesivos gobiernos locales, y que no han conseguido respuesta. Incluso cuando el propio Gobierno Municipal se ha comprometido, en varias ocasiones, en palabras de su portavoz Pedro del Cura “a dar cumplida respuesta”. Algunas de estas cuestiones son: ¿Cuántos edificios propiedad de confesiones religiosas hay en nuestra localidad (de culto y no de culto)? ¿Ha pagado la IC el suelo donde ha construido sus edificios? ¿Ha pagado las oportunas licencias? ¿Está pagando los correspondientes IBI, basuras, ecotasa, vados,…? En caso de que la IC (o las otras iglesias) no atiendan todos estos pagos como cualquier otra entidad o vecino ¿cuánto están dejando de ingresar las arcas públicas por estos conceptos?. En otro orden de cosas, la ALRV también se ha interesado, y el portavoz se ha comprometido a proporcionárselo, por ¿cuántos niños cursan religión en los centros públicos de Rivas? ¿Cuánto le cuestan al Estado los profesores que imparten religión? ¿Qué hacen el resto de los niños, cuando los anteriores están en clase de religión? ¿También se imparten otras religiones además de la católica? Etc.
Todas estas son algunas de las preguntas planteadas por la ALRV en varias ocasiones, al Gobierno Municipal actual (y a los anteriores), y parece ser que son ya más de cinco años los que llevan esperando respuestas…
