El documento firmado por las seis grandes confesiones del mundo advierte sobre la “hostilidad” y la “malinterpretación” del hecho religioso
El encuentro mundial de líderes religiosos puso ayer el punto final a su periplo sevillano con una declaración conjunta en la que se defiende de manera absoluta el valor de la dignidad humana y la importancia del diálogo interreligioso como vehículo para el entendimiento universal y la lucha contra la violencia. La llamada Declaración de Sevilla, leída solemnemente anoche en el pabellón de Narruecos de la Cartuja, destaca el papel jugado por la ciudad y su región en la convivencia de las religiones. “A pesar de las dificultades y las épocas complicadas en el curso de su historia, tanto la región de Andalucía como la ciudad de Sevilla han demostrado en el pasado y en nuestros días su capacidad para proporcionar un espacio adecuado para el diálogo, el respeto mutuo y los encuentros enriquecedores”.
La resolución del encuentro promovido por la Unesco, la Escuela de Elías y la recién nacida Fundación Sevilla Nodo advierte sobre la “hostilidad generada por el comportamiento humano y las consiguientes malinterpretaciones de la religión”. El documento señala que “todas nuestra tradiciones expresan la más alta visión espiritual para la humanidad, pero también han cultivado demasiadas veces actitudes negativas hacia el otro”. Por todo ello, el encuentro de Sevilla insta a “abrazar el espíritu de autorreflexión que ha caracterizado nuestras deliberaciones, en busca del desarrollo de los valores sublimes de la vida humana y su dignidad, la hospitalidad hacia el otro y la prosperidad del hombre que contienen nuestras tradiciones”.
El documento presta una especial atención al estudio del hecho religioso y a la importancia de la educación como vía para evitar los conflictos entre los pueblos y las religiones. La experiencia de Sevilla debe servir, según los líderes de las religiones del mundo, para que la reflexión no se centre en el interior de cada creencia, sino que ésta sea compartida con similares experiencias de otras confesiones.
El documento fue firmado por los representantes de diferentes ramas cristianas, judías, musulmanas, hindúes y budistas, que han constituido en la ciudad el Grupo de expertos de Elías, encargado de profundizar en el diálogo interreligioso. La localidad de Carmona -que aspira a ser declarada Patrimonio de la Humanidad- acogerá esta tarde a los participantes en la cumbre.
